_
_
_
_

El laborismo británico nombra un Gabinete 'en la sombra' a la medida de Kínnock

El grupo parlamentario laborista del Reino Unido eligió ayer un Gabinete en la sombra, ligeramente desplazado hacia la izquierda en relación al existente en el último Parlamento, cuya composición parece hecha a imagen y semejanza del líder del partido, Neil Kinnock. Por su parte, éste pidió ayer al sindicato más poderoso del país su ayuda para llevar a cabo una democratización a fondo de los métodos de selección de candidatos a diputados destinada a eliminar la influencia de la extrema izquierda en los órganos de decisión del laborismo.

La distribución de las carteras entre los 15 nuevos miembros del shadow Cabinet, elegidos por los 229 parlamentarios de la oposición mayoritaria laborista para controlar la labor del Gobierno, será anunciada hoy por Kinnock, quien, según una alta fuente de su partido, ha conseguido el Gabinete en la sombra que perseguía.De las tres tendencias operantes en el laborismo, la extrema izquierda, o Campaign Group, no ha conseguido ni un solo representante en el gabinete. El triunfo ha correspondido al grupo Tribuna de Izquierdistas Moderados, o soft left -del que procede Kinnock-, que ha logrado 9 de los 15 puestos en litigio. Por su parte, el grupo Solidaridad, que representa la tendencia derechista, ha visto su fuerza reducida de 10 a 5, principalmente por la decisión del veterano Denis Healey de no presentarse al Gobierno en la sombra por primera vez en 23 años.

Kinnock necesita un shadow Cabinet totalmente adicto que le permita llevar adelante sus planes, destinados a conseguir la eliminación de la extrema izquierda y de los militantes de los órganos locales del partido chivo expiatorio para la actual dirección del partido de la derrota electoral laborista del 11 de junio, el tercer revés consecutivo que sufre el partido en las urnas.

Cambio de normas

Precisamente a la hora en que se anunciaba en Londres la composición del shadow Cabinet, Kinnock se encontraba dirigiéndose a la conferencia anual del mayor sindicato británico, el Transport and General Workers, para pedir su apoyo, en un cambio de las normas electorales del partido. Kinnock pretende llevar al congreso anual laborista del próximo otoño un plan para permitir que todos los afiliados a las secciones locales, y no sólo la directiva local, como ocurre ahora, voten para la selección de candidatos a diputados.La dirección laborista es plenamente consciente de que necesita un replanteamiento a fondo de sus postulados ideológicos si quiere tener la posibilidad de derrotar a los conservadores en las próximas elecciones generales. Por primera vez, dirigentes laboristas de primera fila se han pronuncia do por una nueva filosofía en los campos económicos y de la propiedad de empresas públicas, para contrarrestar el éxito de los conservadores con su política de venta de casas municipales, a sus ocupantes y con la venta de acciones de empresas nacionalizadas al público. Los sondeos han demostrado que el porcentaje de nuevos propietarios que han apoyado a los conservadores ha sido abrumador.

Una de las estrellas ascendentes en el partido, el organizador de la campaña electoral última, Bryan Gould, que ha obtenido el mayor número de votos para el shadow Cabinet, ha pedido la elaboración de políticas que "sean atractivas al electorado y no sólo a los comités del partido".

Entretanto, los socialdemócratas de David Owen iniciaron ayer una votación entre los 60.000 miembros del partido para decidir si se fusionan con los liberales de David Steel tras los catastróficos resultados obtenidos por la Alianza en las últimas elecciones.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_