El autobús había pasado la última revisión en regla, según Tráfico

Un portavoz oficial de la Dirección General de Tráfico señaló que el autobús accidentado ayer había pasado en regla las revisiones obligatorias. La última revisión que se le practicó al autobús fue efectuada el 30 de julio de 1986 y no tenía que renovarla hasta el 30 de julio de este año, según el citado portavoz.En febrero de 1981 entró en vigor un real decreto sobre inspección técnica de vehículos, por el cual todos los automóviles, están obligados a someterse a inspecciones periódicas. Los vehículos de servicio público o privado dedicados al transporte de personas, con capacidad para 10 o más plazas incluido el conductor, deberán ser sometidos a inspección anualmente si tienen menos de 10 años de antiguedad, y semestralmente si sobrepasan esta cifra.

La finalidad de estas revisiones es garantizar unas condiciones de seguridad homologables a las normas de la Comunidad Europea. Según la Dirección General de Tráfico, en 1985 había en España 41.592 autobuses en circulación, de los cuales 19.290, es decir el 46,38%, contaban con una antiguedad entre 9 y 17 años. Sólamente 7.591 autocares, es decir el 18,25%, tenían menos de cinco años de existencia.

El autocar accidentado ayer fue matriculado el 10 de febrero de 1977, por lo que ya había sobrepasado los 10 años de antiguedad y, en consecuencia, a partir de ahora debía pasar las revisiones con una periodicidad semestral. Los titulares de los vehículos son directamente responsables del mantenimiento al día de las tarjetas de Inspección Técnica de Vehículos (ITV), mediante la presentación a inspección dentro de los plazos ordenados en cualquier estación autorizada, como condición previa a la circulación por las vías de todo el territorio nacional.

Diferencia de criterios

Las funciones y servicios relativos a la ITV fueron transferidas a las comunidades autónomas, que deben establecer la instalación y gestión de las estaciones, así como el seguimiento y control de su funcionamiento. Al Estado corresponde fijar las condiciones mínimas de la línea de inspección para asegurar la debida homogeneidad.

Sin embargo, la diferencia de criterios y exigencias entre los distintos gobiernos autonómicos dificulta la puesta en práctica de esta normativa. Las negociaciones que se encuentran más avanzadas son las de la Generalitat catalana, y en otras comunidades estas negociaciones sencillamente no existen. En la comunidad de Aragón, donde está matriculado el autobús accidentado cerca de Verín, hay tres estaciones de ITV en funcionamiento ubicadas en Zaragoza, Huesca y Teruel y está prevista una unidad móvil contratada.

Este portavoz añadió que la Guardia Civil había inspeccionado los papeles del autocar siniestrado en el lugar del accidente y que "a la luz de esta documentación, la revisión del autobús era correcta".