El banco y los Coca desmienten
La comisión ejecutiva de Banesto reiteró ayer su confianza en López de Letona, según una nota oficial. La comisión afirma en dicha nota que todas las decisiones tomadas en la última etapa lo han sido con el acuerdo unánime de sus consejeros. De este modo desmienten las informaciones sobre las discrepancias de los miembros del consejo de administración acerca de la labor de López de Letona, que tuvieron su origen en una noticia de Televisión Española. También desmienten que Letona haya presentado su renuncia.
Esta unanimidad fue matizada por el portavoz oficial del banco, quien declaró a este periódico que "es razonable que haya discrepancias en el seno de un consejo de administración cualquiera y, por tanto, también en Banesto".
Fuentes cercanas al propio consejo confirmaron ayer la existencia de un creciente malestar, iniciado por la misma llegada de Letona al banco, "impuesto desde fuera". Estas fuentes explican que el vicepresidente no está transformando el negocio estrictamente bancario, sino que mejora la cuenta de resultados "gastando lo que hemos ahorrado durante años", es decir, "vendiendo las reservas (empresas y cartera de valores) del banco, gestadas durante generaciones. Para este viaje no se necesitan tantas alforjas".
Paralelamente, la familia Coca hacia público otro comunicado en el que manifestaba estar al margen de esta nueva polémica sobre las tensiones de Banesto. Ayer, el abogado de los Coca, Enrique Sánchez-Prieto, se puso en contacto telefónico con Fernando Castromil, secretario de la entidad, para reiterarle su postura de no entrar en los problemas internos de Banesto. Tras esta llamada cesaron las acusaciones veladas o explícitas a los Coca de ser los instigadores de una "campaña de intoxicación". Antes, el propio Castromil había declarado a un diario económico que las noticias sobre Banesto estaban movidas "por Sarasola [amigo y asesor personal de los Coca] en un último intento por cargarse al señor López de Letona".
El portavoz oficial de Banesto negó ayer que los Coca estuvieran detrás de la "campaña", cuando 24 horas antes había declarado a este periódico que "Sarasola ataca de nuevo".
