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Mitares de escalas minoritarias se consideran discriminados respecto a los de academia

Carlos Yárnoz

Los militares de escalas minoritarias en las Fuerzas Armadas -como los procedentes de milicias universitarias y de la escala especial -se consideran discriminados en los programas de reformas que afectan a las plantillas de los tres Ejércitos, y especialmente en los planes para reducir esas plantillas totales en 8.000 hombres -de 66.000 a 58.200- para el año 1991.

Los integrantes de las escalas auxiliar y especial se quejan especialmente de las mínimas oportunidades que tienen para ascender, mientras los de la complementaria o de milicias universitaria señalan, además, que están siendo apartados de las Fuerzas Armadas.Actualmente, en las Fuerzas Armadas hay alrededor de 4.000 oficiales y suboficiales pertenecientes a la Escala de Complemento. Se trata de universitarios que, tras el período de prácticas, solicitaron integrarse como profesionales en los Ejércitos. Todos ellos, como sargentos o como alféreces, firman contratos temporales de permanencia en las Fuerzas Armadas cada dos o tres años. Hasta el año pasado, cuando superaban los ocho años de permanencia, suscribían ya otro contrato que suponía la integración, hasta la edad de retiro, en los Ejércitos.

Sin embargo, y debido a un decreto aprobado el año pasado, a los oficiales y suboficiales que alcanzan los ocho años de permanencia en los Ejércitos ya no se les permite renovar sus contratos, por lo que deben abandonar las Fuerzas Armadas. En medios de Defensa se asegura que esta norma continuará vigente hasta 1991, año en que el Gobierno pretende conseguir la prevista redección de plantillas militares.

En los últimos años se han convocado escasísimas plazas para el ascenso en esta escala. Como término medio, un alférez pasa dos o tres años hasta que asciende a teniente, grado en el que pasa alrededor de 15 años, y, ya como capitán, rara vez asciende a comandante, que es el máximo grado posible en esta escala. También en la escala especial existe este tope de carrera, que sólo es alcanzado por el 2% de sus integrantes.

En otros países, como EE UU, no hay limitación en el empleo o grado que pueden alcanzar los militares de la Escala de Complemento.

La mayoría llega a coronel

Por el contrario, militares de ambas escalas consultados al respecto ponen de relieve que los oficiales de la Escala Activa -procedentes de las academias- ascienden casi exclusivamente por antigüedad y el 85% consigue el grado de coronel.Los integrantes de estas escalas citadas, y especialmente los de complemento, se quejan por la incertidumbre de su futuro y por la nula información que reciben al respecto. Además, los miembros de las tres escalas aseguran que en el Ministerio de Defensa o no responden a sus reivindicaciones o dan respuestas encaminadas a soslayar el problema.

La ley orgánica de la Defensa, aprobada en 1980 y modificada en 1984, señala que una ley determinará las vicisitudes de la carrera militar y de las escalas. La ley aún no ha sido elaborada -probablemente se trata de la ley de la Función Militar-, pero, según fuentes de Defensa, será a partir de la elaboración de esa ley general cuando puedan desarrollarse normas concretas para cada una de las escalas. En medios oficiales del Ministerio de Defensa se indica que, cuando las Fuerzas Armadas están en pleno proceso de reducción de plantillas, es "lógico" que sean los militares no profesionales -no procedentes de las academias- los primeros en tener que sufrir las consecuencias. Estas fuentes reconocen que es incierto el futuro de los integrantes de la Escala de Complemento, debido a la ausencia de una ley reguladora de su situación.

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Sobre la firma

Carlos Yárnoz
Llegó a EL PAÍS en 1983 y ha sido jefe de Política, subdirector, corresponsal en Bruselas y París y Defensor del lector entre 2019 y 2023. El periodismo y Europa son sus prioridades. Como es periodista, siempre ha defendido a los lectores.

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