La caída de la actividad económica norteamericana en abril aleja el objetivo de un crecimiento del 3,5% para este año
La actividad económica norteamericana registró en el mes de abril un descenso del 0,6%, frente a un alza del 0,8% en el mes anterior. Ello, según los expertos, aleja la posibilidad de que en 1987 se alcance un crecimiento económico del 3,5%, tal como ha previsto el Gobierno norteamericano. Según el departamento de Comercio estadounidense, la reducción de los leading indicators -principales indicadores económicos- se debe a la abundancia de días de fiesta durante el mes de abril, la caída en la producción industrial, de la construcción y de los pedidos de bienes de equipo y maquinaria.En base a estos resultados, los expertos. consideran que el crecimiento económico de EE UU se situará en el 2,5%, el mismo porcentaje que, durante la reunión semestral del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial celebrada el pasado mes de abril en Washington, se estimó para el conjunto de naciones industrializadas. Este nivel, según los especialistas, es insuficiente para estimular la actividad económica internacional y, especialmente, la de los países en vías de desarrollo.
La Bolsa de Tokio, entre tanto, reacciona con una fuerte subida ante el anuncio por parte del Gobierno japonés de un paquete de medidas para estimular la economía, según informa Shearson Lehman/ American Express. El índice selectivo Nikkei de los principales valores subió ayer 338,74 puntos que le colocan en un nuevo récord histórico de 24.772,39. El dólar subió también en el mercado de divisas de Tokio 0,65 puntos con un cambio al cierre de 144,15 yenes.
La peseta se depreció igualmente frente a la divisa norteamericana, al quedar el cambio fijado en 127,01 pesetas por dólar, frente alas 126,40 del pasado jueves.
La Bolsa de Frankfort reaccionó positivamente ante esta relativa fortaleza del dólar., al cerrar la semana con alzas generalizadas. Tanto los inversores extranjeros como los domésticos centraron sus operaciones en valores orientados a la exportación, fundamentalmente automóviles, aunque los bancos también registraron buena demanda.
