¡Qué 'alucine', tíos!

Después del último eslogan electoral del PSOE, aquel que decía: "Por buen camino", uno esperaba algo en parecida línea de modestia. Pero no. Estos jóvenes agresivos y triunfadores ejecutivos desideologizados del PSOE, exultantes por el éxito consegui-, do en las elecciones legislativas, han retomado la más pragmática línea de la mercadotecnia del detergente, apabullándonos con su lacónico: "Las cosas bien hechas".Como digo, uno, en su ingenuidad, esperaba algo más poético, más enfático y proverbial, más realista incluso. Por ejemplo: "Felipe aprieta, pero no ahoga"; o este otro: "Felipe escribe recto con líneas torcidas"; o también alguno con resonancias orientales, aprovechando la simpatía del presidente por los proverbios chinos: "La paciencia es la virtud de los pueblos que triunfan. Job es vuestro modelo".

Desgraciadamente no ha sido así. Los muchachos del PSOE nos alucinan sencilla y llanamente diciéndonos que las cosas están bien hechas, y que vivimos en el mejor de los mundos posibles, y que tenemos el mejor de los alcaldes. ¡Toma ya! Menos mal que el parado que tenemos contratado para el semáforo de la esquina de mi calle es corto de vista y no llega a ver los carteles.

Como dijo en cierta ocasión el inefable don Camilo: "España es un país excesivo". ¡Demasiado, tíos!-