Roldán defiende que la Guardia Civil cumplió su deber en Reinosa
El director de la Guardia Civil, Luis Roldán, explicó ayer en la Comisión de Justicia e Interior del Congreso de los Diputados que los guardias que han intervenido en Reinosa a raíz de los graves sucesos registrados en esa localidad cumplieron con su obligación. ¿Para qué y cómo actuó la Guardia Civil?", se preguntó. "Para mantener la legalidad democrática, dijo, y nunca antes de que se produjeran "graves" desórdenes o incumplimento de las leyes. Para Nicolás Sartorius, de Izquierda Unida (IU), hay indicios de que los guardias actuaron el 16 de abril, día de Jueves Santo, por venganza.
Roldán afirmó que la actuación de los guardias se ajustó a la legislación vigente y agregó: "Asumo la responsabilidad del empleo de la Guardia Civil en la resolución de un problema al que intencionadamente se ha hecho rebasar los límites de lo puramente sindical".El director de la Guardia Civil acusó de "sensacionalismo y sectarismo" a quienes han realizado afirmaciones irresponsables" o "falsas acusaciones" sin pruebas: Sin embargo, eludió informar si se habían descubierto o no actuaciones irregulares a raíz de los vanos centenares de denuncias y 63 querellas criminales presentadas por vecinos de Reinosa contra los guardias.
Sartorius dijo que tiene "indicios" para pensar que el 16 de abril -la jornada de mayor número de enfrentamientos- los guardias actuaron dentro de " una auténtica operación de represalia contra todo un pueblo, con tintes de venganza", debido a las agresiones y pérdida de armas que habían sufrido el 12 de marzo, fecha en que se iniciaron los incidentes más graves.
Para apoyar esta afirmación mostró una fotografía de una tanqueta de la Guardia Civil tomada, según él, en Reinosa, con una pintada en la que se leía: Ramiro, te vengamos. Sartorius especuló con la posibilidad de que Ramiro sea el nombre de un guardia herido en anteriores incidentes en Reinosa.
El diputado comunista también dijo que había "indicios" de que se hubiera producido "un homicidio" por la muerte del trabajador de Forjas y Aceros Gonzalo Ruiz -que falleció tras inhalar tóxicos procedentes de botes de humo-, extremo que rechazó Luis Roldán, quien afirmó que un carcinoma que tenía el trabajador en el riñón izquierdo pudo influir en el proceso clínico.
Coincidiendo con la comparecencia de Roldán, unos 50 trabajadores de Reinosa se manifestaron ante el Congreso de los Diputados con fotograrias de Gonzalo Ruiz, camisetas con la inscripción Reinosa quiere vivir y pancartas con frases como Roldán, Barrionuevo, del sillón a la prisión o Castigo a los asesinos.
El presidente de la Comisión, el socialista Carlos Sanjuán, no permitió, por considerarlo "improcedente", que se proyectara durante la sesión el vídeo presentado por IU.
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