El mercado muestra su maquinaria oculta
La agilidad propia de las pequeñas cosas ha impuesto su lógica en los mercados de valores, obligando a la bolsa madrileña a desempolvar viejas normativas, sacándolas del baúl para intentar seguir los rápidos movimientos que están imponiendo Bilbao y Barcelona, la primera sin limitación en las variaciones y la segunda con una vuelta adicional que también rompe ese límite. El estrangulamiento a que se ven sometidos alguno! valores, por falta de papel o dinero, cuenta desde hace tiempo con la posibilidad de que se abra un período de reflexión seguido de un nuevo corro para tratar de clarificar las posiciones. La Bolsa de Madrid autorizó ayer la puesta en marcha de este mecanismo para dos valores, causando gran confusión en el mercado, pero, en cualquier caso, abriendo la posibilidad de que se repita en lo sucesivo.El papel, en claro avance a la hora del cierre, hará reflexionar a los inversionistas sobre la necesidad de limitar el precio de sus operaciones o, cuando menos, de exigir de las juntas sindicales que las posiciones compradoras o vendedoras sean siempre vinculantes, lo que evitará el que las órdenes sean infladas en beneficio de aquellos inversores que se encuentran en el parqué y que, por tanto, tienen mayor capacidad de movimientos.
Al margen de estas anécdotas, la sesión se caracterizó por una fuerte presencia de órdenes compradoras para los valores eléctricos e importantes realizaciones de beneficios en los, sectores industriales, lo que perfiló un mercado de difícil resolución para las próximas jornadas.
Las posiciones al cierre indicaban un avance vendedor, aunque siempre con excepciones, lo que lleva a suponer que las sesiones vienen van a ser más conflictivas, al menos en tanto se conoce la verdadera evolución del IPC del último mes.
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