El Gobierno aumentará de cuatro a seis millones de pesetas el exento del impuesto de herencias

El Gobierno introducirá cuatro importantes modificaciones en el proyecto de ley del impuesto sobre sucesiones y donaciones, según señaló en el seminario Renta 87 el secretario de Estado de Hacienda, José Borrell, quien comentó el anuncio que sobre esta materia realizó el pasado sábado el ministro de Economía, Carlos Solchaga, en las XI Jornadas Costa Brava, organizadas por el Círculo de Economía. La más importante de estas modificaciones significa que en las sucesiones mortis causa, la base imponible podrá sufrir una reducción de hasta seis millones de pesetas, según el grado de parentesco y edad. En el caso de menores de edad y subnormales, el mínimo exento se aumentará hasta 12 millones de pesetas.

Ello supone una importante ampliación del mínimo exento establecido en el proyecto para, las sucesiones mortis causa, que oscila entre uno y cuatro millones de pesetas. En la legislación vigente, la base imponible se reduce en 10.000 pesetas cuando se trata de descendientes, ascendientes y cónyuges cuya participación personal no supere las 100.000 pesetas.Borrell señaló también que se ampliaría el período de aplazamiento de pago hasta siete años (el proyecto fija cinco) para favorecer la sucesión en las pequeñas y medianas empresas, viviendas y activos no líquidos. Por otra parte, se prevé introducir una serie de reducciones específicas en los casos de sucesiones repetidas. Es decir, cuando una misma herencia haya sido objeto de varias transmisiones sucesivas, en un corto espacio de tiempo, se aplicará una reducción a los tipos del impuesto.

Tributación inferior

La cuarta modificación prevista se refiere a las herencias de los agricultores. Hacienda estudia una bonificación de hasta el 50% en los casos en que concurran determinadas condiciones y circunstancias.Altos cargos de Hacienda coincidieron en destacar que de aplicarse el conjunto de estas mejoras en el proyecto de ley, significaría que las herencias de una cuantía inferior a los 64 millones de pesetas soportarían un tributación inferior a la legislación vigente. Ello supone una importante mejora a lo previsto en el proyecto aprobado por el Consejo de Ministros el pasado mes de enero, según el cual las herencias inferiores a 32 millones tendrían que pagar menos al fisco que en la actualidad.

Estas modificaciones reflejan que Solchaga y Borrell han sido receptivos a las peticiones efectuadas desde distintas esferas del mundo empresarial que habían manifestado su inquietud por la introducción del nuevo impuesto.

En el curso del seminario Renta 87, Eduardo Cosmen Matesanz desarrolló las principales características del nuevo proyecto. En este sentido, destacó que los objetivos del nuevo tributo no eran recaudatorios sino más redistributivos y complementarios del impuesto sobre la renta de las personas físicas. Recordó que la recaudación en 1986 por el impuesto sobre sucesiones había alcanzado 37.000 millones de pesetas.

Entre las mayores novedades destacó la reducción de la multiplicidad de tarifas existentes y la simplificación de su gestión. El nuevo impuesto tendrá una tarifa única con tipos progresivos que van desde el 9% al 40%, según la cuantía de las adquisiciones.