El Banco de España da el primer paso para la integración en el SME
SALVADOR ARANCIBIA, El Banco de España dio ayer lo que se considera como el primer paso para la integración de la peseta dentro del Sistema Monetario Europeo (SME) al firmar el acta de adhesión al acuerdo entre los bancos centrales de los Estados miembros de la Comunidad Europea que fija las modalidades de funcionamiento del SME. El acuerdo establece que el Banco de España depositará el 20% de sus reservas en oro y dólares en el Fondo Europeo de Compensación Monetaria, recibiendo el contravalor en ECU, fondos que se utilizan para mantener estables las paridades de las monedas europeas.
La firma del acta de adhesión al acuerdo de 13 de marzo de 1979 entre los bancos centrales de los países de la CE por parte del Banco de España forma parte de la estrategia a largo plazo que llevará a España a integrar la peseta dentro del SME y a la necesidad de coordinar más estrechamente la política monetaria nacional con la que establezcan el resto de países miembros, algo que no ocurre demasiado en la actualidad.El gobernador del Banco de España, Mariano Rubio, señaló en el Congreso de los Diputados, hace ya varios meses, la necesidad de caminar hacia una mayor integración de España en los movimientos monetarios europeos tanto desde el punto de vista de liberalización en la, circulación de capitales como en la integración en los mecanismos supranacionales como el SME.
Esta tendencia a largo plazo fue reafirmada posteriormente por el ministro de Economía, Carlos Solchaga, y de hecho de lo que se trata ahora es de llegar a definir con cierta aproximación la fecha de plena integración de la peseta en el SME y las modalidades de su adhesión.
Todos los países miembros de la CE, salvo Portugal, han firmado el acta de adhesión al acuerdo de Basilea, aunque hay algunos países, Reino Unido, Grecia y España, que no han suscrito el mecanismo de cambios de sus divisas frente al ECU -unidad de cuenta europea- y frente al resto de las divisas que forman parte del Sistema Monetario Europeo. El mecanismo de cambios fijos establece una banda de fluctuación de la monedas entre sí que origina, nuevos reajustes internos cada vez que una o varias de las monedas sufren movimientos al alza o a la baja.
Mecanismo de solidaridad
En definitiva, se señala en fuentes del Banco de España, se ha entrado en un mecanismo de solidaridad entre los países miembros de la CE que se utiliza para impedir movimientos bruscos de las paridades monetarias al tiempo que se refuerza el papel del ECU como futura divisa de las naciones miembro de la comunidad.
El acuerdo establece que el Banco de España se compro mete a poner a disposición del Fondo Europeo de Cooperación Monetaria (Fecom) el 20% de sus reservas en oro y dólares acreditándose a cambio un depósito de esas reservas en su contravalor en ECU.
El banco central mantiene la titularidad de esos fondos y su gestión y sólo los entrega realmente en la medida en que el Fecom los solicita para ayudar en las intervenciones para impedir fluctuaciones muy fuertes de las divisas de los países integrados.
El Banco de España puede también, movilizar los ECU que mantiene contra el Fecom para realizar adquisiciones de otras monedas, lo que facilita, en momentos determinados, la disminución de las tensiones especulativas que pueda sufrir la peseta.
El funcionamiento del sistema consiste en que el Banco de España se compromete a poner a disposición del Fecom el 20% de sus reservas en oro y dólares con periodicidad trimestral, contabilizando las existentes al principio de cada período. España se integrará de hecho en el acta de Basilea en el próximo mes de julio cuando realice el primer swap de sus reservas contra ECU.
La firma, en cualquier caso, tampoco significa la integración de la peseta dentro de la cesta de monedas que forma parte del ECU, algo que tendrá lugar cuando la divisa española se adhiera al Sistema Monetario Europeo.
La coordinación monetaria
Los deseos de aproximar la política monetaria española a la que le practica en los países miembros de la CE crecen en las esferas del Banco de España en la misma medida en que la realidad muestra mayores desviaciones. La adhesión de España a la CE ha provocado, entre otras cosas, un desplazamiento de la economía española hacia la llamada "área del marco" frente a la que hay que medirse mucho más de lo que se hacía hasta ahora.Por ello, una desviación sustancial de las prácticas económicas que lleven a cabo los países miembros de la CE no puede, según la mayor parte de los expertos, sino traer problemas para la economía española. Los hechos de las últimas semanas no hacen sino avalar esta tesis.
El Ministerio de Economía, ante los problemas de crecimiento del crédito al sector privado y de financiación del déficit, decidió endurecer la política monetaria, elevando los tipos de interés, lo que provocó de inmediato entradas masivas de divisas procedentes de los países de la CE. Una mayor coordinación habría impedido una política tan restrictiva y, por lo tanto, esa avalancha de divisas.
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