El plan de viabilidad de Standard se basa en reducir 4.143 empleos y aumentar el capital y las ventas a Telefónica
Pasadas las cinco de la madrugada de ayer quedó firmado el plan de viabilidad para Standard Eléctrica, la filial del grupo Alcatel NV, propietaria de la ex división de telecomunicaciones de ITT en Europa. El plan abarca desde 1987 a 1991 y prevé una reducción de 4.143 empleos, 2.440 por jubilaciones anticipadas a los 55 años y el resto por bajas voluntarias. Costará a la empresa 30.000 millones de pesetas y otros tantos a la Administración.
También contempla el plan unas compras por parte de Telefónica evaluadas por Standard en 311.870 millones de pesetas corrientes, si bien Telefónica sólo ha aceptado especificarlo en unidades físicas, sin cuantificarlo en precio, que dependerá del propio mercado. Otra de sus previsiones es incrementar el capital en 17.700 millones de pesetas (14.000 aportados por Alcatel y 3.720 por Telefónica), así como unas ayudas a fondo perdido de la Administración por importe de 3.800 millones de pesetas.En el plan de viabilidad se reconoce que Alcatel ha iniciado negociaciones para la venta de Marconi a Ericsson, estableciéndose una cláusula que garantiza que, en caso de que las conversaciones con la firma sueca no fructifiquen, Alcatel, conjuntamente con la Administración, elegirán al nuevo candidato. La venta de Marconi, según el documento suscrito en la madrugada de ayer, queda condicionada por el plan de viabilidad que debe hacerse en esa firma, que se regirá por el Decreto 1.380/1984, que regulaba el plan de reconversión tanto de Standard como de la propia Marconi, y no deberá tener una carga en las cuentas financieras de Standard superior a 8.270 millones de pesetas.
Paralelamente, Alcatel y UGT, único sindicato presente en la comisión de seguimiento y mayoritario en el comité intercentros de Standard, llegaron a un acuerdo sobre el convenio colectivo de la empresa para los próximos tres años.
Éste reconoce un incremento salarial que oscila entre el 5,8% y el 6,3% -según categorías-, más deslizamientos, para 1987, y un incremento del 120% sobre la inflación en 1988 y del 125% en 1989. Asimismo se incluye una reducción de 24 horas -ocho cada año- al final del próximo trienio en las horas anuales trabajadas, que pasarán de las 1.732,5 en la actualidad a 1.708,5 en 1989.
La UGT flexibilizó a última hora sus pretensiones iniciales, que apuntaban a una reducción de jornada de 35 horas al final de los tres años y un incremento del 140% y del 160% sobre la inflación en 1988 y 1989, respectivamente.
Según el plan de viabilidad, podrán acogerse a las prejubilaciones quienes cumplan 55 años entre 1987 y 1991 -hasta un máximo de 2.440 personas-, que se irán incorporando a los expedientes de regulación de empleo el día 1 de cada año en que cumplan esa edad. De manera inmediata va a presentarse un nuevo expediente de regulación para 2.270 trabjadaores. Se estima que unos 450 podrán acogerse inmediatamente a las prejubilaciones.
Cláusula abierta
En el acuerdo firmado se ha includido una cláusula adicional en la que se señala que si al término del plan de viabilidad no se acogen a las bajas voluntarias -indemnizadas con dos anualidades brutas, con un mínimo de tres millones de pestas, y que afectarán teóricamente a 1.703 personas-, la comisión de seguimiento deberá decidir las nuevas medidas que se adopten.La central UGT consideró improcedente, a preguntas de los periodistas, que se sugiriera la posibilidad de recurso al artículo 51 del Estatuto de los Trabajadores, que permite la rescisión de contratos si los trabajadores no aceptan las bajas voluntarias.
Según la dirección de Standard, la empresa podrá volver a los números negros en 1989-1990. Los cálculos de Standard para los próximos cinco años preven vender dentro y fuera de España por un importe de unos 478.000 millones de pesetas.
No han quedado desveladas las condiciones propuestas por Ericsson, ni las compensaciones solicitadas por adquirir Marconi, ni tampoco los excedentes que se contemplan en la firma.
