La frecuencia de los atentados en Barcelona provoca el desconcierto policial y la movilización de los partídos
La frecuencia de los atentados con coche bomba perpetrados por la organización terrorista ETA en Barcelona -tres en 15 días- ha provocado el desconcierto de la policía barcelonesa, impotente y carente de pistas fiables ante un fenómeno nuevo en Cataluña. Los partidos políticos catalanes anunciaron ayer el inicio de una campaña popular de rechazo del terrorismo, que se iniciará con anuncios pagados en la Prensa y proseguirá con la adhesión de numerosas instituciones y entidades políticas, económicas y sociales a la declaración aprobada el pasado 27 de marzo por el Parlamento de Cataluña.
La policía comienza a trabajar sobre la idea de que el comando Barcelona está integrado posiblemente por entre cuatro y seis personas que disponen de una infraestructura preparada hace meses, aunque admite la práctica imposibilidad de detectar un coche bomba antes de que estalle. La razón de esto último es que los vehículos utilizados por ETA llevan matrículas que corresponden en la práctica a automóviles del mismo color y modelo que no constan como robados.Fuentes oficiales ratificaron ayer las palabras del gobernador civil de Barcelona, Ferran Cardenal, poco después del último atentado, en el sentido de que "ETA ya tiene una estructura en Barcelona que le permite, por el momento, realizar este tipo de atentados con toda impunidad".
El automóvil que estalló el pasado jueves delante del banco francés Société Général de Banque en Espagne, a sólo 100 metros de la Delegación del Gobierno en Cataluña, contenía 20 kilos de explosivo sin metralla y fue activado por radio desde un lugar muy cercano. Había sido sustraído en San Sebastián el pasado día 1 de septiembre. El atentado causó tres heridos leves -Javier Juliá Hidalgo, de 12 años; Dolores María Salida, de 18, y Juan Antonio Hidalgo Fernández, de 45- y cuantiosos daños materiales.
La policía halló en el lugar del suceso dos pilas de 4,5 voltios y otras cuatro de 1,5 voltios. Lo investigadores desconocían ayer la composición exacta del explosivo, aunque sospechan que contenía dinamita. Hasta el momento, ETA únicamente ha utilizado metralla en Barcelona en los atentados cuyos objetivos eran policías o guardias civiles. Contra los demás objetivos -hasta ahora, siempre entidades francesas-, los terroristas han utilizado solamente explosivo sin metralla. En relación a los dos vehículos sospechosos de haber huido del lugar del atentado, las pistas han resultado ser falsas. Según la policía, se trataba de particulares que abandonaron el lugar al producirse la explosión.Adhesión popularEl vehículo utilizado como coche bomba, un Opel Kadett, llevaba colocada la matrícula B-7530FK, que corresponde a un coche de las mismas características -marca y color- propiedad de José Parra, de Barcelona, que no consta como robado. La utilización de placas de matrícula idénticas a las de automóviles sobre los que no pesa ningún tipo de denuncia, hace prácticamente imposible que los coches de los terroristas puedan ser descubiertos, según fuentes policiales.
Representantes de los seis grupos del Parlamento catalán acordaron ayer emprender una campaña para recabar el rechazo de la población al terrorismo. El primer acto de esta campaña será la publicación y emisión, mañana, en todos los medios de comunicación de Cataluña, de un llamamiento a todas las instituciones, entidades y asociaciones para que se adhieran a la declaración de condena del terrorismo que el propio Parlament aprobó el pasado 27 de marzo, a raíz de un atentado con coche bomba.Los partidos pretenden conseguir un alto grado de participación en esta campaña con adhesiones de todo tipo, desde ayuntamientos hasta entidades culturales y deportivas, para demostrar que el rechazo del terrorismo en Cataluña se produce tanto entre las organizaciones políticas como en la sociedad civil. En una segunda fase, los partidos se plantean promover otras formas de movilización popular.
