El Ejecutivo debe corregir la injusticia para acabar con la conflictividad

El Gobierno puede en estos momentos contribuir a un descenso de la conflictividad siendo más sensible a las "legítimas demandas e iniciando la corrección de las injusticias sociales", según el escrito que ayer entregó Nicolás Redondo al ministro del Interior, José Barrionuevo. El documento que el secretario general de UGT leyó posteriormente a los representantes de la Prensa, es, según han interpretado en medios sindicales, una forma de hacer llegar al Gobierno cuál es la postura de la central socialista en torno a la conflictividad.El encuentro entre el ministro del interior y la delegación cle UGT se produjo a petición de Barrionuevo, que quiso estudiar con los sindicatos los excesos de violencia en los conflictos laborales.

El escrito entregado por Nicolás Redondo contiene, en esencia seis puntos. Por su importancia, merece la pena destacar la exígencia de la central socialista de que se abandonen las instrucciones políticas en las empresas públicas y se permita a sus gestores negociar libremente con los sindicatos.

También se propone que se deje autonomía negociadora a las partes -patronal y sindicatos-, se reconsidere el decreto sobre la prórroga de los fondos de promoción de empleo, y se desarrollen los acuerdos presupuestarios del mes de septiembre, sobre retribuciones de los funcionarios y fondos especiales de inversión.

Aumentar la protección social

Otro de los puntos que UGT plantea como acción de Gobierno encaminada a reducir la conflictividad es aumentar la protección social de los parados, de manera que se elimine así un motivo de crispacíon social.En definitiva, según han comentado en medios sindicales, "se intenta especificar dónde se encuentran los orígenes de la conflictividad. A saber: en el exceso de intervencionismo, en las instrucciones políticas sobre salarios en empresas públicas, en las medidas adoptadas sobre reconversión, en la falta de cobertura por desempleo... Cosas que ya se habían adelantado en otras ocasiones

Nicolás Redondo señaló que UGT protagonizado huelgas y manifestaciones al amparo del derecho constitucional, pero procura no caer en la violencia, y afirmó que la imposición de topes salariales en nada favorece Ia paz social.

Sobre un encuentro con Felipe González, el secretario general de la central socialista indicó, según Europa Press, que no tenía previsto reunirse de momento ni veía motivos para ello.

Barrionuevo calificó de positiva la entrevista y subrayó que la entrevista y su deseo de tratar el tema de la violencia con los agentes sociales no podía interpretarse como un intento de interferir en el derecho de huelga de las organizaciones obreras.