Controlar la venta de armas figura como primordial objetivo del CESID

El control de las ventas de armas en España figura hoy como objetivo primordial del Centro Superior de Información de la Defensa (CESID), el principal servicio español de información integrado en el Ministerio de Defensa, según afirma un destacado miembro de este organismo. "Se mueve demasiado dinero y hay gente involucrada muy peligrosa", ha dicho.

Según esta fuente consultada, ya hace varios meses que el CESID modificó sus objetivos ante la importancia política que tomó la exportación de armas desde España. "Ha superado en importancia a la investigación sobre movimientos involucionistas", ha precisado.

España figura en diversos estudios internacionales entre los diez primeros exportadores mundiales de armamento. Los destinos de estas armas son, fundamentalmente, países de Latinoamérica y de Oriente Próximo. Muchas de estas ventas están bajo control administrativo directo, ya que son analizadas por la Junta Interministerial Reguladora del Comercio Exterior de Armas, que concede o no la definitiva licencia para realizar la exportación. En muchos casos, los exportadores deben presentar un certificado de último destino para las armas.

Falsificaciones

Sin embargo, en España se han registrado ya numerosos casos en los que esos certificados han sido falsificados, en ocasiones con el conocimiento de altos cargos de la Administración. Así, numerosas partidas de armas cuyo destino oficial era Jordania o Libia, han sido enviadas finalmente a Irak e Irán, respectivamente. En algunos casos, además, empresas privadas españolas han conseguido los más importantes contratos, aunque algunas empresas públicas fabrican los mismos productos. De esta forma, se han favorecido intereses privados y, por el contrario, las operaciones apenas han contribuido a mejorar el nivel tecnológico de la industria española de defensa, según fuentes del departamento.Basándose fundamentalmente en contratos irregulares, empresas privadas han facturado el año pasado más de 20.000 millones de pesetas, mientras las principales empresas públicas de armas -Santa Bárbara, Bazán y Construcciones Aeronáuticas, S A (CASA)- han acumulado el año pasado unas pérdidas globales que superan esa cifra.

Asimismo, empresas extranjeras anuncian en revistas especializadas direcciones en España para la venta de cañones u otros sistemas de armas.