_
_
_
_

FECSA propondrá un tipo de interés para su deuda de hasta 1,5 puntos por debajo del preferencial

El presidente de FECSA, Luis Magaña, propondrá a sus acreedores bancarios la renegociación de la deuda de la compañía con tipos de interés de hasta 1,5 puntos por debajo del precio del dinero en el interbancario de Madrid y en el de Londres, según sean operaciones en pesetas o en divisas. Para compensar esta pérdida inicial, FECSA pagará tipos más altos a partir de 1992, cuando la sociedad prevé que habrá absorbido la totalidad de sus costes diferidos (unos 125.000 millones de pesetas, según las previsiones actuales). Magaña se entrevistará hoy con el ministro de Industria y Energía, Luis Carlos Croissier, para exponerle un primer esbozo concreto de su plan de viabilidad.

A lo largo de los últimos días, y una vez comunicada a los bancos acreedores la intención de renegociar la totalidad de su deuda bancaria (unos 260.000 millones de pesetas), FECSA ha delineado el esquema de propuesta que presentará a los bancos a partir de la primera semana de abril, cuando está previsto que comiencen la ronda de entrevistas con los sindicatos de bancos acreedores. La primera reunión, cuya fecha está aún por concertar, se celebrará con el Citibank, como agente de un crédito de 40 millones de francos suizos cuyo principal (3.500 millones de pesetas) no se abonó el pasado día 17, fecha en que vencía.Según fuentes solventes, la intención de FECSA es, una vez explicadas las causas de la crisis de la empresa y los planes del nuevo equipo para garantizar su viabilidad, proponer plazos más largos para sus créditos y unos tipos de interés crecientes a partir de un punto y medio -como media de las hipótesis barajadas por la sociedad- por debajo del coste del dinero preferencial en Madrid y Londres (Mibor o Libor), según el tipo de operación.

FECSA expondrá, asimismo, la teoría de que sus ingresos se basan en el concepto de "anualidades crecientes" sobre el que se está estructurando el esquema o "marco general" que el ministerio de Industria y Energía de línea para el futuro del sector eléctrico.

El marco general

Las anualidades crecientes permitirán a la sociedad anular el diferimiento de costes acumulados en 1992 y, a partir de entoces, comenzar a compensar a los bancos por el "lucro cesante" que hayan soportado en los primeros cinco años del plan de viabilidad. "Para 1992 se habrán absorbido la totalidad de los costes diferidos, cuya primera estimación se sitúa en 125.000 millones de pesetas", según fuentes solventes.Magaña y Luis Carlos Croissier tienen previsto reunirse hoy en la sede del ministerio. En la reunión es de prever que el presidente de FECSA informe al ministerio de las últimas decisiones adoptadas por la sociedad frente a sus acreedores, y los programas de viabilidad. Es de esperar, según deducen fuentes próximas al problema, que Magaña reitere algunas de las demandas ya formuladas en la primera reunión con el ministro como presidente de FECSA y que hacían referencia a la inclusión de la compañía dentro del "marco general" del sector.

Dentro de este contexto, es de esperar una solicitud para que se consideren las peticiones históricas de FECSA respecto a la no discriminación del futuro sistema de compesaciones, de la necesidad de una vuelta a la normalidad en relación a la financiación de la morataria nuclear y la reconsideración de algunos aspectos del contrato de Endesa que penaliza a las empresas adquirientes de energía, fundamentalmente la obligación de "tener que pagar la energía que, a veces, no se adquiere". La idea central, según las fuentes próximas al problema, es que "la viabilidad de FECSA no debe ser sacrificada en aras de hacer más que rentables otras compañías del sector". Tal es el caso del sistema actual de compensaciones que, según la empresa, castiga a FECSA, al no reconocer inversiones de hasta 125.000 millones, previamente auditadas, en las instalaciones de Ascó.

Los actuales responsables de FECSA argumentan que, sin la promesa de solución de estos problemas previos, "será muy difícil explicar a los acreedores para hacer sacrificios en la renegociación de la deuda, ya que hasta ellos se darán cuenta de la sociedad no es viable en las actuales condiciones". FECSA "ha reconocido ya que pudo haber errores de gestión, pero la corrección de estos errores no implica de por sí el reequilibrio de la sociedad. Hay problemas que deben ser abordados a otro nivel", según un alto directivo de la sociedad.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_