Mercado indeciso, con acento vendedor

Las posiciones vendedoras se han impuesto con claridad en la jornada de cierre semana¡ al no haberse producido ningún cambio en las constantes del mercado. La falta de alicientes pugna con la ausencia de alternativas, conformando un ambiente de indecisión en el que resulta difícil tomar decisiones. El precio del dinero empieza a sonar cada vez más como argumento a la hora de justificar la ausencia de iniciativas, tanto por parte de la inversión institucional como de la particular, aunque esta última cuenta con menos posibilidades en ese terreno.El nuevo castigo recibido por los valores eléctricos ya era un indicador fiel de la posible línea que iba a seguir el mercado, y ello a pesar de que algunos de sus componentes consiguieron cerrar la sesión con algún pequeño avance. Los, sectores industriales rompieron la trayectoria de los últimos viernes y terminaron con pérdidas generalizadas, a pesar de que la selección continúa aportando dinero a algunos valores. Las escasas subidas que se produjeron en estos grupos casi nunca consiguieron variar el sentido negativo de la sesión. .

El sector bancario mostró una extraña coincidencia en todos sus componentes, pues sólo uno de ellos, el Bankinter, tuvo un saldo favorable a la demanda. No obstante, los restos fueron de poca importancia en la mayoría de los casos, lo que no se tradujo en las oscilaciones de los precios. Los siete grandes registraron bajas entre cinco y 50 enteros, con una sola repetición. El volumen negociado ascendió ligeramente, aunque todavía se mantiene por debajo de los 500.000 títulos para estos siete valores.

Las posiciones al cierre, mostraban un movimiento inusual tras una sesión de estas características, lo que lleva a suponer que la trayectoria de la semana próxima va a depender de los intercambios efectuados a lo largo de la tarde.