Un licenciado en historia, nuevo director general de la BBC

La junta de gobernadores de la British Broadcasting Corporation (BBC) -el ente público de radiotelevisión británico- ha nombrado a Michael Checkland, un licenciado en Historia Moderna y profesor mercantil de 50 años, nuevo director general de la veterana entidad.Checkland, que desempeñaba la dirección general interina, sustituye en el cargo a su antiguo jefe, Alasdair Milne, cuya dimisión solicitaron los gobernadores hace dos meses tras una serie de incidentes, entre los que se encuentran la supresión de un reportaje sobre la construcción de un satélite,espía y el enfrentamiento con el presidente del Partido Conservador, Nórman Tebbit, que acusó de tendenciosa a la BBC por la forma de presentar un reportaje sobre el bombardeo norteamericano en Libia.

El nombramiento de Checkland, que entró en la BBC en 1964 como ejecutiyo financiero y ha desempeñado varias funciones administrativas hasta su nombramiento como subdirector general en 1985, ha sido interpretado como una fórmula de compromiso al fracasar aparentemente el presidente de la corporación, Marmaduke Hussey, en sus intentos de que la junta de gobernadores -una especie de consejo de administración- aprobase la designación del conocido periodista David Dimbleby.

Revuelta

Samuel Brittan, hermano del ex ministro del Interior León Brittan y miembro de la Comisión Peacock que ha preparado el informe sobre la reorganización de la BBC, manifestó ayer a la televisión que el posible nombramiento de Dimbleby había provocado "una revuelta de palacio", una clara referencia al hecho de que, aunque siempre ha actuado en la BBC, no forma parte de la plantilla de la casa.Aunque el nombramiento de Checkland obtuvo la unanimidad de todos los gobernadores, las discusiones para lograr esa unanimidad duraron todo el día y su anuncio no se pudo realizar hasta cerca de la medianoche del jueves. La elección de Checkland como nuevo director general indica que los gobernadores han preferido al final un administrador responsable a un brillante realizador.

Checkland, que no tiene ninguna experiencia en la realización de programas, se ha ganado a lo largo de muchos años una justa fama de administrador o buena ama de llaves, como lo califica un periódico, unas cualidades que le harán mucha falta en el futuro para cuadrar los presupuestos de la BBC, sometidos por el Gobierno conservador a los límites de una licencia que sólo podrá aumentar de acuerdo con el índice del coste de vida.