'Amerika'
EL LANZAMIENTO por una cadena de televisión norteamericana de un serial dedicado a presentar una invasión del territorio de Estados Unidos por las tropas soviéticas (Amerika) se ha convertido en un hecho político. No es la primera vez que la hipótesis de una invasión soviética se traduce en película. Pero en este caso sorprende el momento escogido para lanzar ese tema al público. La interpretación que viene a la mente es que se trata de contrarrestar, con las imágenes inevitablemente horribles de una sociedad norteamericana sometida a la ocupación de soldados soviéticos, el impacto favorable que está logrando en la opinión pública la política inaugurada por Mijail Gorbachov.La tentación de volver al antisovietismo puede ser fuerte, porquela imagen de una Unión Soviética agresiva que espera el momento de atacar a EE UU ha sido una ideología muy eficaz que ha permitido a diversos equipos gobernantes norteamericanos lograr amplios consensos populares. Pero el cambio de Gorbachov parece cada vez más real, como más reales resultan las dificultades del equipo de Reagan para reaccionar con un esfuerzo de imaginación y de renovación ante el desafio que eso constituye. Washington da la sensación de no estar preparado para contestar al nuevo fenómeno representado por los cambios interiores que se inician en la Unión Soviética. Esta falta de preparación de la Casa Blanca ante una política muy emprendedora en Moscú contribuye a deteriorar la credibilidad deReagan, y estimula a diversas esferas norteamericanas a informarse directamente de lo que ocurre en la Unión Soviética, a buscar su propia explicación de los acontecimientos. Tendencia que se reflejó en el reciente viajé de una amplia delegación no oficial, con Kissinger y otras personalidades, a Moscú. Esta ciudad, que ha sido durante muchos años la capital de la gerontocracia, ha renunciado a ese respetable privilegio. Washington ha recogido la antorcha.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.