Las farolas de Sol
Como residentes en la ciudad de Madrid desde hace escasos meses, nos ha llamado poderosamente la atención la actitud de buena parte de la opinión pública respecto a las farolas situadas, aún ahora, en la Puerta del Sol.Pensamos que la reforma efectuada en la Puerta del Sol ha mejorado, con unos criterios acertados, de forma sustancial el espacio urbano que engloba, tanto en las obras de superficie como de subsuelo, siendo las farolas la iluminación de la plaza en general uno de los logros de esta reforma.
Igualmente nos ha sorprendido el hecho de que prácticamente la totalidad de las propuestas de sustitución de las farolas han planteado alternativas involucionistas en el tiempo. Sólo han faltado propuestas para iluminar la plaza con antorchas o candiles de aceite.
Creemos que esta actitud ante las esbeltas farolas de Sol ofrece diversas lecturas, pero para nosotros destaca aquella que revela un tradicionalismo mal entendido, un conservadurismo de ideas, un simbolismo caduco que nos incita a pensar en la sombra de Franco: las secuelas de 40 afios dedicados a aplastar y suprimir todas las manifestaciones culturales posibles se reflejan en la Puerta del Sol. Posiblemente, muchos de los detractores de las farolas de Sol viesen realizados sus sueños inconscientes si en lugar de farolas modelo lira o fernandino fuesen las instaladas en la plaza modelo yugo y flechas.