Alcohol en la carretera

El consumo de bebidas alcohólicas-no sólo ha causado 64 víctimas en las carreteras españolas durante el puente de la Inmaculada (editorial de EL PAIS del pasado 10 de diciembre), sino que, según las cifras corrientemente manejadas por los organismos internacionales, causará una media de 100.000 muertes cada año en las carreteras del mundo.Ante estas cifras que nos amenazan a todos, conductores o no, consumidores de bebidas alcohólicas o abstemios irredentos, no podemos sino hacer causa común e instar a las autoridades para que adopten todas las medidas necesarias, a la vez que apliquen con toda severidad las ya existentes a aquellos individuos que, sin duda por tener sus capacidades mentales disminuidas, no dudan en ponerse al volante de un automóvil después de consumir bebidas alcohólicas.Buenas medidas serían rebajar el índice permitido de alcohol en la sangre del conductor y, al igual que en otros Estados más civilizados, llegar incluso a imponer sanciones penales, tipificando estos comportamientos sin que haya que esperar a que el accidente se produzca para aplicar la ley con todo su rigor a esta especie tan común del suicida-homicida que circula por nuestras carreteras.

Aquel lema tan popular -"Si bebes, no conduzcas"- que nos repetía hace algún tiempo el cantante de moda será la divisa de oro para todos, a la vez que cada uno de los conductores españoles deberá conjugarla adecuadamente: "Si bebo, no conduzco", cuando las gentes de España alcancen una madurez cívica de la que hoy carecen.-

. Secretario de la Asociación de Amigos del Alcohol (ADADA).