Los socialistas aplazan las negociaciones sobre el Consejo de RTVE

Las conversaciones para la elección de los consejeros del Ente Público RTVE pueden aplazarse una semana más, según afirmaron ayer fuentes socialistas. La situación política creada tras la dimisión de Manuel Fraga y el enrarecimiento de las relaciones entre el PSOE y Minoría Catalana hacen pensar a los socialistas que es mejor esperar algunas semanas más antes de decidir el reparto de consejeros.

Minoría Catalana y el PDP aspiran a un consejero, cuando en estos momentos lo único seguro es que en ese órgano estarán representados el PSOE, AP y el CDS. El PDP decidió ayer emitir una protesta formal ante la Comisión parlamentaria de Control de RTVE por el reportaje emitido el sábado en TVE titulado "Fraga, un león en invierno", al considerar falso que ese partido imputara a Manuel Fraga la responsabilidad de no obtener un buen resultado en las elecciones del mes de junio. Fuentes del partido democristiano dijeron ayer que estudiarán la posibilidad de acogerse a la ley orgánica del Derecho de Rectificación, según la cual en el plazo de siete días TVE tendría que realizar una rectificación en el mismo espacio informativo.La Junta de Portavoces del martes decidió incluir en el pleno de la próxima semana la elección de los doce consejeros de RTVE, seis en el Congreso y seis en el Senado.

Según ese calendario las negociaciones previas se realizarían a lo largo de este fin de semana. La impresión recogida en fuentes socialistas y de la oposición es que ese proceso negociador puede aplazarse una semana más o incluso hasta el próximo período de sesiones.

La propuesta socialista inicial es la de obtener para su partido la mayoría en el Consejo, esto es, siete consejeros, tres para Alianza Popular y los otros dos para las minorías. El CDS tiene asegurada la representación, no tanto Minoría Catalana y casi descartado el PDP.

Tensión con Roca

Después de la resolución judicial en torno a Banca Catalana, que exculpó al presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, de toda responsabilidad en el caso, las relaciones entre los nacionalistas catalanes y los socialistas, lejos de aproximarse, se enrarecen.La pasada semana, el portavoz de Minoría Catalana declinó estampar su firma en el acuerdo sobre la financiación de los partidos políticos, considerando que en éste se observan, a su juicio, signos de inconstitucionalidad.

La respuesta del portavoz socialista, Eduardo Martín Toval, fue muy dura y relacionó esa negativa con un posible cambio de actitud si Minoría Catalana tuviera asegurado un puesto en el Consejo de RTVE. Así las cosas, los socialistas prefieren esperar unas semanas tanto por Minoría Catalana como por la evolución del Grupo Popular, sobre todo, en lo que se refiere a su cohesión.