_
_
_
_
_
LA CAMPAÑA DE LAS ELECCIONES VASCASLos candidatos y sus partidos

Los irreductibles

Herri Batasuna (HB) no es un partido, sino "un bloque político de unidad popular", según su propia terminología. Unidad popular es lo que significa en castellano su denominación. En realidad, se trata de un movimiento de escasa definición ideológica basado en la convergencia de dos sensibilidades políticas diférentes, el nacionalismo radical de raíces rurales y la protesta obrera de sectores castigados por la crisis industrial, articulado en torno a un programa elemental conocido como plataforma KAS. El contenido de ésta es el derecho de autodeterminación y la unidad territorial del sur del País Vasco, que incluiría a Navarra.Formalmente, HB es una coalición entre dos partidos, el Partido Socialista Popular Revolucionario (HASI) y Acción Nacionalista Vasca (ANV), de los que sólo este último tiene reconocimiento legal, más una amplia masa de personas no adscritas a ninguna de estas organizaciones. Es imposible conocer cifras de afiliación. El carácter de unidad popular excluye el encuadramiento en las estructuras clásicas de los partidos. No existe el carné ni la cuota obligatoria y no es posible conocer una cifra siquiera orientativa de militantes.

Más información
"En elecciones, los otros venden pedazos del pastel de HB"

Los simpatizantes se reúnen en asambleas de barrio o pueblo. Cada una elige un representante en la asamblea provincial, encargada de escoger los candidatos para las elecciones, pero ésta es abierta y puede asistir quien quiera. La Mesa Nacional está formada por 31 personas. Cada uno de los dos partidos designa cuatro, cada provincia otros cuatro y los siete restantes son cooptados como representantes nacionales.

HB dispone de 16 liberados y locales o sociedades populares en casi todas las poblaciones vascas, financiados con las aportaciones económicas de los simpatizantes. Sus dirigentes calculan que en período electoral movilizan unas 15.000 personas en tareas de propaganda y organización. La cifra es verosímil.

Desde su creación el 27 de abril de 1978, en la llamada Mesa de Alsasua, presidida por el ex ministro de Interior del primer Gobierno vasco, Telesforo Monzón, HB ha logrado mantener e incrementar su presencia en la sociedad vasca. En términos absolutos, referidos sólo a las tres provincias de la comunidad autónoma vasca, la coalición ha logrado pasar de los 149.000 votos que obtuvo en las elecciones generales de marzo de 1979 a los 193.000 de junio pasado. Esas cifras representan un crecimiento desde el 15% hasta el 17,4% de los votos emitidos. Cuenta con cinco diputados en el Congreso, un senador y 11 diputados en el Parlamento vasco. Ninguno de ellos ha tomado posesión de sus escaños.

La presencia social de las ideas independentistas y radicales de HB es relativamente amplia. Bajo su influencia, de forma más o menos acentuada, pueden considerarse las gesto ras proamnistía, que agrupa a los familiares de presos junto a un núcleo especialmente duro de militantes; el sindicato LAB, la coordinadora de alfabetización, que cuenta con decenas de centros de enseñanza del euskera por toda la geografía vasca; casas editoras de libros y discos, el diario Egin y dos de los tres semanarios que se editan en lengua vasca.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_