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Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

Un buen Chabrol

Lamentábamos la semana pasada, a la par que celebrábamos el inicio de un ciclo de 10 películas de Claude Chabrol, que éste comenzara, como quien dice, a initad de viaje; que no se marcara una perspectiva de lo que fueron los principios del cineasta, sin duda decisivos del cine francés contemporáneo. También que se vulnerara la siempre necesaria cronología anticipando El tigre se perfuma con dinamita a la anunciada Landrú, película anterior y una de las indiscutibles obras maestras de Chabrol.Pues bien, vamos a seguir lamentándonos. Parece ser que Landrú ha desaparecido del mapa. Se ha desintegrado. O, en cualquier caso, queda aplazada, agravando así la deseada cronología. Para hoy está prevista la emisión de Las ciervas (Les biches, 1968). Las ciervas se sitúa en una de las etapas más fructíferas del cineasta francés.

En esta etapa fecunda de thrillers y paisajes de provincia abiertos en canal, Chabrol se permitió, con Las ciervas, un irónico melodrama con un clásico triángulo sentimental como trama. Empieza el embrollo cuando Why (así se llama la espléndida Jacqueline Sassard en esta película), una bohemia pintora que está dibujando unas ciervas en medio de la calle, acude al reclamo de un billete de 500 francos; billete que acaba de dejar caer sobre la acera Frédérique, rica mocosa de Saint Tropez.

Why, como por inercia, se deja seducir, por lo menos fascinar, por Frédérique. Pasan varios meses en su casa hasta que un día, en una sorée de ésas que nunca faltan en las altas sociedades, aparece el hombre imprescindible. Su nombre, Paul. El triángulo ya ha formado a la perfección sus líneas. En manos de Lelouch, un argumento de estas características naufragaría al primer fotograma.

Chabrol, por suerte para todos los que hoy veamos Las ciervas, no es Lelouch. Sabio, Chabrol usa una música, de Pierre Jansen, y una fotografía, de Jean Habier, que unen sus texturas a la búsqueda de una redimensión del arte rosa de la fotonovela. Y él, sierripre cauto, rehúsa el efectismo propio de estos temas, incluso evita dar mayor importancia a un asunto serio como es el de la dependencia de una majer sobre otra y las relaciones amorosas a tres bandas.

Su retrato de los personajes y del contexto social en que se mueven es siempre de una limpia justeza expositiva.

Las ciervas se emite hoy por TVE-2 a las 22.10.

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