La ORA se extenderá hasta la plaza de Castilla

La Concejalía de Circulación se propone ampliar la Operación de Regulación de Aparcamiento (ORA), en el primer trimestre de 1987, a la zona comprendida entre las calles de José Abascal, paseo de la Castellana hasta la plaza de Castilla y calle de Bravo Murillo, y posiblemente al barrio de Embajadores, según informó Valentín Medel, concejal del área. En las nuevas zonas se instalarán canceladores automáticos de tarjetas, mientras los bonos, en los restantes barrios, se venderán desde el 1 de enero en los quioscos.

El deseo municipal de implantar la ORA en la zona situada al norte ole la calle de José Abascal está motivado por la gran afluencia de vehículos de personas no residentes que se produce en horas laborables, lo que crea continuos problemas de tráfico.Si esta zona, en la que viven 95.000 residentes, no ofrece prácticamente ninguna duda a la hora de: su incorporación al área de aparcamiento limitado, no ocurre lo mismo con la zona del barrio de Embajadores. La ampliación que está en estudio afectaría al área comprendida por La carrera de San Francisco, Gran Vía de San Francisco, puerta de Toledo, ronda de Toledo, glorieta de Embajadores y ronda de Valencia hasta la glorieta de Atocha. Asimismo, se aprovecharía esta ampliación para incluir la zona situada en torno a la plaza de las Vistillas.

El hecho de que estos barrios no hayan sido incorporados ya y que se dude aún sobre su inclusión se debe a que, según un estudio realizado en 1985, los 60.000 residentes que viven en esta zona tienen 7.600 vehículos, mientras hay tan sólo unas 6.000 plazas de aparcamiento en superficie. Este déficit ha venido desaconsejando la incorporación, al ser contraproducente la aplicación de la ORA en un barrio donde ya sin ella los residentes tienen graves problemas para aparcar.

Canceladores automáticos

Según Medel, la ampliación de la ORA irá acompañada de la instalación de canceladores en las calles. En ellos los usuarios podrán sacar una tarjeta en la que quedará fijada la hora de expedición y la de caducidad. La empresa instaladora de estos aparatos se ocupará también de contratar a las personas encargadas de vigilar y denunciar las infracciones.

Asimismo, el Ayuntamiento ha llegado a un acuerdo con laasociación de vendedores de Prensa para que desde 1 de enero se vendan en los quioscos las tarjetas para aparcar en las zonas donde no haya canceladores. El precio será el autorizado por el Ayuntamiento para 1987, es decir 28, 56 y 84 pesetas según sea para 30, 60 o 90 minutos. No está decidido si los estancos seguirán vendiendo los bonos a partir de 1987.