El capital a corto plazo busca su refugio en España
El capital extranjero a corto plazo, que suele moverse por razones especulativas en buena parte de los casos, lleva unos cuantos meses apostando por la estabilidad de la peseta y sus tipos de interés, como lo demuestran los datos del registro de caja del Banco de España correspondientes al pasado mes de agosto, en los que hay anotada una entrada de 750 millones de dólares. Las reservas de divisas aumentaron en agosto en 1.186 millones de dólares, aumento algo superior al registrado un mes antes y muy por encima del mismo mes del año anterior.El saldo de la balanza comercial en agosto, con un déficit de 472 millones de dólares, es algo peor del existente en el mismo, mes de 1985 por un escaso crecimiento de las exportaciones españolas y una elevación sustancial de las compras en el exterior de productos no energéticos, a pesar de que también descendió la adquisición de petróleo. El saldo del turismo presenta un crecimiento importante de los ingresos -junto a un estancamiento de los pagos - y las transferencias recogen el primer pago de los anticipos a la Comunidad Europea a cuenta del IVA. Anticipos que serán devueltos en forma de subvenciones comunitarias en los próximos meses. Con todo ello el saldo de la balanza por cuenta corriente sufre, en agosto, un empeoramiento de 100 millones de dólares frente al mismo mes de 1985.
La balanza de capital a largo plazo muestra la misma tendencia de los últimos meses, con fuertes entradas de inversiores extranjeras a las que acompañan salidas de divisas como consecuencia del pago anticipado de parte de la deuda externa española. El aumento de las reservas en agosto se debe, según los datos del Banco de España, tanto a la mejora de la balanza por cuenta corriente como a la elevada entrada de capital extranjero a corto plazo que busca refugiarse en la fortaleza relativa de la peseta frente al resto de las monedas, en especial el dólar, y de los elevados tipos de interés que mantiene España.
Récord de divisas
Al final de los ocho primeros meses del año el nivel de reservas de divisas se coloca en 17.329 millones de dólares, cifra récord, gracias a un superávit de la balanza por cuenta corriente superior a los 3.600 millones de dólares, mientras que hace un año no superaba los 1.000 millones. Este superávit se debe a una mejora del saldo de la balanza de servicios -donde se incluye el turismo- de 1.600 millones de dólares y a la reducción del déficit comercial en más de 1.000 millones de dólares.La balanza de capitales a largo plazo muestra un saldo negativo de 2.738 millones de dollares, debido sobre todo al pago anticipado de créditos exteriores, que ha alcanzado la cifra de 7.450 millones de dólares. El saldo de las inversiones extranjeras en España ha pasado de 1.394 millones de dólares hasta agosto del pasado año a 3.172 millones en 1986.
