La izquierda francesa sufre un nuevo retroceso en las urnas

La izquierda francesa experimentó un nuevo retroceso electoral en los comicios indirectos para la renovación de un tercio del Senado que se celebraron ayer con la participación de un cuerpo electoral de casi 50.000 electores, formado por diputados, consejeros generales y regionales y delegados de consejos municipales. Los resultados de la elección parcial de ayer para cubrir los ocho escaños en la Asamblea Nacional del departamento de Alta Garona parecían reflejar similares tendencias en el electorado.

Los principales beneficiarios de las elecciones de ayer parecen ser, en primer lugar, el RPR (Asamblea para la República), del primer ministro, Jacques Chirac, que se convierte en el primer partido de la Cámara alta, y, en segundo lugar, el Partido Republicano, que dirige el ministro de Cultura, François Leotard.Las elecciones al Senado registran a largo y medio plazo las variaciones que se producen en las elecciones municipales, cantonales y regionales. No tienen una repercusión más que secundaria en el panorama político del país.

La izquierda en su conjunto, que contaba con 102 escaños, pasa a 90 y la derecha pasa de 211 a 229. En la ciudad de París el retroceso de la izquierda ha sido espectacular. De los 12 escaños en litigio, 11 han ido a parar a la derecha y uno tan sólo al Partido Socialista. El Partido Comunista, aunque retrocede tal como se preveía, consigue, con sus actuales 15 senadores, mantener el grupo parlamentario.

La tendencia general del electorado francés manifestada desde 1981 se confirma también en las elecciones legislativas parciales celebradas en Alta Garona, resultado de la anulación de las efectuadas en marzo de este año. En ellas se han enfrentado el secretario general del Partido Socialista, Lionel Jospin, y el alcalde de Tolouse, Dominique Baudis.

Otra vez Jospin

Jospin, que en las primeras evaluaciones iba perdiendo sólo algunas décimas de punto, parece haber superado la prueba de estas elecciones, válidas sobre todo en el interior de su partido, después de su reciente aislamiento, resultado de las batallas entre los barones socialistas tras el abandono del Gobierno y la apertura de la carrera para las presidenciales de 1988.Frente al 37,4% obtenido por los socialistas, la lista de la mayoría, que tiene por líder a Dominique Baudis, consigue el 46%, tres puntos más que en marzo pasado, mientras que los comunistas retroceden dos puntos, y un punto y medio del Frente Nacional, ambos por encima del 6% aproximado de los votos.

Todas las elecciones celebradas desde 1981 han sido desfavorables a la izquierda, y en especial al Partido Comunista. Las elecciones de ayer estaban, pues, claramente determinadas por las elecciones anteriores y debido a ello, más que de una prueba, debe hablarse de expresión en el Senado del retroceso experimentado por la izquierda en los últimos años.

Dos nuevos miembros de la Alta Cámara son Philippe de Gaulle y Maurice Couve de Murville, hijo y primer ministro, respectivamente, del general De Gaulle, que precisamente mantuvo unas turbulentas relaciones con el Senado.