Ascó 2 deberá superar una serie de pruebas antes de recibir permiso para producir

El Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) no se reunirá hasta el próximo viernes para examinar la información sobre la situación de la central nuclear de Aseó y decidir si autoriza su puesta en marcha de nuevo. En cualquier caso, la central deberá superar una serie de pruebas antes de recibir la autorización definitiva para volver a la fase de producción. Por otra parte, la federación del PSC en la que se enclavan los municipios de Ascó y Vandellós ha acordado pedir que el consell nacional que se celebrará en octubre revise la posición del partido en relación a las centrales nucleares.

El CSN espera recibir el próximo jueves el informe de la central, que incluirá el elaborado por los cuatro técnicos norteamericanos de la empresa Monroe, suministradora del mecanismo que acciona las válvulas de aislamiento de vapor, cuyo fallo reiterado motivó la decisión fulminante de parar la central por parte del CSN. Este informe será examinado por la dirección técnica del Consejo de Seguridad Nuclear, antes de ser sometido a la decisión del pleno del consejo, que se reunirá excepcionalmente el viernes.En el caso de que el consejo decidiese autorizar la puesta en marcha de la central, es seguro que exigirá la realización de una serie de pruebas concretas, por lo que la central precisará más de cinco días para entrar de nuevo en fase de producción. La puesta en marcha desde la posición de parada en frío precisará tres o cuatro días, a los que habrá de añadir varios días más para la ejecución de las pruebas que ordene el consejo.

Por otra parte, la comisión ejecutiva de la Federación XV del PSC, que abarca tres comarcas e incluye los municipios de Ascó y Vandellás, hizo público ayer el acuerdo adoptado en una reunión celebrada anteayer de pedir al partido que revise su posición en relación a la energía nuclear.

Una comisión

La federación acordó "instar al Consell Nacional del PSC a la creación de una comisión específica que analice si es suficiente la actual moratoria nuclear, o si es necesario plantearse el desmantelamiento de las centrales nucleares, si no es posible asegurar su control y seguridad totales".Los dirigentes socialistas se pronuncian "en contra del reinicio de la actividad de Ascó 2 hasta que no se clarifiquen de manera absoluta las causas del fallo de los mecanismos de seguridad y se asegure, por tanto, su correcto funcionamiento", e instan a los parlamentarios del partido a que propongan al Consejo de Seguridad Nuclear "la incorporación de las conclusiones, surgidas de la conferencia de expertos nucleares de Viena en los diferentes planes de seguridad y de emergencia tanto internos como externos de las centrales".

La federación pone de manifiesto "la falta de materialización de los medios contemplados para las acciones logísticas del PENTA (Plan de Emergencia Nuclear de Tarragona) ya que la infraestructura viaria y hospitalaria actual hace inoperante cualquier puesta en funcionamiento del citado plan". "En este sentido", continúa, "se llama la atención ante la situación crítica de la red viaja sobre la zona de Ascó, Ríba-reja d'Ebre, Flix y Pont de Garcia, que hace impensable una hipotética evacuación de las poblaciones. Las inversiones previstas en esta zona, a cargo del canon energético, son compartidas con otras inversiones a realizar por parte del Consell Executiu de la Generalitat, que hasta ahora no se han llevado a término".