Anmistía Internacional denuncia la actuación de comandos parapoliciales en Chile

Las fuerzas de seguridad en Chile han desarrollado "una nueva estrategia del terror", por la que actúan a través de grupos clandestinos para secuestrar, torturar y asesinar a los opositores al régimen del general Augusto Pinochet, según un informe publicado el miércoles, en Londres, por Amnistía Internacional.

Según este documento, grupos ilegales como Acción Chilena Anticomunista (ACHA) han multiplicado sus acciones desde que se intensificaron las protestas contra el régimen militar, a partir de 1983. Estos grupos actúan abiertamente durante las horas del toque de queda, y en función de datos que generalmente sólo suelen poseer los servicios de información del Gobierno.

Amnistía Internacional afirma que en 1985 se produjeron 64 secuestros, y considera como hecho probado -incluso en el marco de investigaciones judiciales- que en los grupos clandestinos que los realizaron participaron miembros de las fuerzas de seguridad vestidos de civil.

Según Amnistía Internacional, las fuerzas de seguridad siguen torturando y realizando secuestros "para silenciar a la oposición". La represión, según el texto de Amnistía Internacional, se halla dirigida principalmente contra los representantes de la Iglesia, los defensores de los derechos humanos y los dirigentes políticos y sindicales.