Un ex ministro protesta, pistola en mano, contra la ineficacia dél teléfono en la India
Prakash Chand Sethi , que fue ministro del Interior de: la India en 1984, cuando el Ejército asaltó el Templo Dorado de los sijs, irrumpió, pistola en mano franqueado por tres guardaespaldas, en la central telefónica de: Nueva Delhi, poco después de la medianoche del pasado viernes, para exigir que le conectaran una. llamada al extranjero.La red telefónica en la India funciona con la, irregularidad que es habitual en muchos países del Tercer Mundo. Como promedio, se calcula que únicamente uno de cada cuatro usuarios logra hacer llegar su llamada al abonado que desea al primer intento, al menos en las comunicaciones que no sean locales. Al mismo tiempo, la espera para lograr una conexión que no sea automática puede durar un mínimo de dos horas y en ocasiones incluso días enteros.
Huelga de protesta
El incidente ha sido el detonante de una huelga de protesta de 1.000 operadores de la central telefónica asaltada, la subsiguiente ocupación de la misma por el Ejército para asegurar el servicio y una polémica en la Prensa nacional que dura ya cuatro días.
The Hindustan Times, encontrándole algún beneficio al altercado, dijo que el asalto a la central telefónica había servido al menos para llamar la atención de la opinión pública sobre el deplorable estado del sistema telefónico del país. "No permitamos", dice el diario en un editorial, "que por causa de la indiscreción de Sethi se pierda de vista una cuestión crucial: el nivel de ineficacia, insensibilidad e insolencia en las conexiones telefónicas en India es suficiente para volver loco a cualquiera". Al mismo tiempo el periódico señala que no se puede disculpar la actitud de un ex ministro que en las dos últimas semanas ha hecho gala de su excéntrico comportamiento poniendo en apuros al primer ministro de la nación, Rajiv Gandhi, en una recepción oficial y emprendiéndola a insultos, en otra ocasión, con todo el equipo de boxeo de Nepal. "¿Pero por qué demonios", termina el editorial, "tenemos que esperar a que aparezca un Sethi para conseguir que las conexiones telefónicas funcionen en India como en el resto del mundo civilizado?".
Kiran Fatima, la operadora que había atendido la llamada que Sethi, que había solicilado un número de Bombay, aseguró que había intentado la conexión tres veces sin conseguirlo, y que el ex ministro había empleado lenguaje obsceno diciendo que mujeres como ella podían comprarse por 50 centavos. Por su parte, Sethi rechaza la versión dada por la operadora de su intercambio telefónico con ella. "Tenemos los teléfonos más espantosos del mundo", asevera; "si vieran cómo estaba ese sitio aquella noche, todo lleno de mujeres gordas y perezosas, todas y cada una de ellas". Sethi justificó llevar armas y rodearse de guardaespaldas por la amenaza que pende sobre su vida desde que fue ministro del Interior, y ordenó el asalto al templo sij.
Los operadores de la central de de Nueva Dellii regresaron ayer al trabajo tras haber recibido lo que reclamaban: una carta de disculpa de Sethi.
