Piher propone cerrar la factoría y crear una sociedad anónima laboral

La dirección de Piher, SA, propone el cierre de la empresa matriz del grupo y la creación de una sociedad anónima laboral (SAL) con una plantilla de 242 trabajadores, según determina el plan de viabilidad elaborado por el gabinete de asesoramiento Buxó y Lúquez por encargo de la dirección de Piher. En la actualidad trabajan en la factoría de Badalona 414 empleados. El acuerdo final podría ser firmado el próximo lunes entre las partes y las administraciones.El diagnóstico que el plan de viabilidad ofrece de la actual situación de Piher atribuye a la utilización de la maquinaria con bajos índices de rendimiento y a la falta de modernización de las estructuras productivas la mayor influencia en el actual estado de la fábrica. Y responsabiliza a la situación interna del grupo el haber impedido realizar un adecuado proceso de modernización.

Del plan presentado por la empresa se deduce que Piher es inviable por dos motivos: por el endeudamiento elevado, que se cifró en 4.539 millones de pesetas el 30 de abril de 1986, para el que se dispone de 498 millones para hacerle frente, y por una excesiva mano de obra directa. A pesar de todo, el plan de viabilidad concluye que en el mercado nacional la empresa no tiene competidores en el campo de las resistencias, y que se reparte el 50% del mercado de los condensadores con CSA.

Respecto al mercado internacional, la competencia es fuerte aunque el número de clientes es considerado "satisfactorio" y en el ejercicio de 1985, el 64% de las ventas se hicieron al extranjero. Sin embargo, el descenso de un 20% en relación a las ventas de 1984 se debe más a la situación interna de la sociedad que a una pérdida real de mercado.

Es precisamente la fácil salida de los productos que fabrica en el mercado la que aconseja, según los autores del plan, la creación de una nueva empresa SAL, de la que el 60% del capital lo aportaría la plantilla prevista de 242 trabajadores y el 40% restante se repartiría en partes iguales entre el "accionista capitalista" y el "socio que incorpore tecnología". La operación comportaría una nueva inversión de 1.157 millones de pesetas.