Txomin Iturbe espera en Gabón su traslado a otro país

El supuesto máximo dirigente de ETA Militar, Txomin Iturbe Abasolo, espera en la República de Gabón, adonde fue deportado por Francia, resolver su actual situación y trasladarse a otro país, para lo cual las autoridades policiales de esta nación africana le han transmitido oficialmente su compromiso de realizar las gestiones necesarias para encontrar otro país que lo acoja. Mientras tanto, el dirigente histórico más buscado por la policía española y que ha sobrevivido a varios atentados en el sur de Francia reside en un apartamento del centro de Libreville, de donde sale exclusivamente a comer y a comprar los periódicos.

Txomin Iturbe ha explicado a este periódico que la policía gabonesa le ha transmitido que estas medidas se toman por su propia seguridad. "Sólo espero resolver mi situación aquí".El dirigente de ETA Militar pasa sus días en Gabón fundamentalmente leyendo. "En el apartamento", dice, "no tengo radio ni televisión ni teléfono, y me dedico a leer la Prensa y algún libro. Salgo a comer y a cenar, y por las tardes puedo salir a comprar los periódicos". Txomin Iturbe ha aceptado esta situación oficialmente temporal y sólo desea solucionar su estancia en este país. "Nadie me ha dicho si estoy deportado o puedo marcharme a cualquier país; no sé nada y tampoco tengo mi pasaporte ni ningún papel". Txomin Iturbe, vestido con vaqueros y camiseta blanca, parpadea constantemente. "Soy de por sí nervioso, pero con esta situación estoy peor". Sus manos están siempre en movimiento y, tras un encuentro fortuito en un hotel de Libreville con este enviado especial se le detecta más tranquilo que en la primera reunión mantenida en presencia del director general de la Policía de Documentación, el coronel Ossiali, responsable de su custodia en la República de Gabón.

Txomin Iturbe acogió con alegría la noticia transmitida por este periodista de que el capitán Peciña sería puesto en libertad por las autoridades nigerianas, y declina la invitación de tomarse una copa ante la inevitable custodia de dos policías gaboneses que no se apartan de él más allá de un metro de distancia.

El dirigente de ETA Militar no puede ocultar cierto malestar por la constante vigilancia de que es objeto, y con una obvia dosis de resignación se despide temporalmente hasta otra ocasión. Tras este segundo encuentro, el líder de la organización terrorista se encuentra mucho más tranquilo después de haber podido comunicarse con su abogada francesa, Christianne Fando, y con su familia. Aunque todavía desconoce el régimen de vida en que se encuentra oficialmente en Gabón, Txomin Iturbe ha perdido el nerviosismo que se le observaba el primer día, indudablemente producto de una expulsión de Francia que probablemente él no esperaba y de las palabras vacías de las autoridades gabonesas, así como del síndrome de soledad.

No hace declaraciones

El hombre más buscado por la policía española y también por los medios de comunicación durante momentos de gran tensión por la actividad terrorista de ETA y por las futuras posibilidades de abrir una negociación con el Gobierno español, se mantiene firme en su postura de no realizar declaraciones sobre estos temas. Este silencio no es una costumbre exclusivamente suya, sino de toda la organización, que siempre se ha mantenido alejada de los medios de comunicación, a excepción de los comunicados enviados a determinados medios periodísticos vascos para reivindicar atentados, y en escasas ocasiones para hacer llegar a la opinión pública su información sobre algún tema determinado (recientemente hicieron público un comunicado sobre los contactos mantenidos por la organización con miembros de la Administración española).

Actualmente se mantiene en Gabón la incertidumbre y la ambigüedad sobre la situación de Txomin Iturbe, tras el acuerdo reservado llevado a cabo en París entre la Presidencia de la República de aquel país africano y las autoridades del Ministerio del Interior francés, por medio del cual Libreville se comprometió a acoger a Txomin Iturbe durante un período de dos o tres, meses, mientras París encontraba una residencia definitiva para Iturbe.

También se desconoce oficialmente si a Iturbe Abasolo, tras su expulsión de Francia, le ha sido retirado el estatuto de refugiado político que le había side, concedido en este país, en cuyo caso el asunto ahora sería exclusivamente una cuestión. española, y gabonesa.

Por el momento, las autoridades policiales de Gabán mantienen oficialmente la postura de que Txomin Iturbe es libre y sólo se encuentra custodiado por su propia seguridad.