Las joyas de las norteamericanas
"¿Están las mujeres norteamericanas dispuestas a prescindir de sus joyas"?, se ha preguntado el jefe del gabinete del presidente, Donald Regan, al explicar por qué la Administración se opone a aplicar sanciones económicas contra Suráfrica. Este comentario, calificado inmediatamente de machista e intolerable por varios miembros del Congreso, ha provocado una reacción airada en la opiInión pública y refleja la insensibilidad demostrada hasta ahora por Washington hacia la crisis surafricana y la tozudez de Ronald Reagan en no cambiar de política. "Es duro creer que haya podido decir esto", explicó abrumado un portavoz de la Casa Blanca, justo cuando se prepara una revaluación de la política hacia Suráfrica.Regan, en una entrevista con periodistas, se preguntó también: "¿Dónde van a conseguir los americanos el cromo para sus apliques del cuarto de baño y para los parachoques de sus automóviles si sancionarrios a Suráfrica?". Regan justificó su posición diciendo que los israelíes, belgas y holandeses quizá no estén dispuestos a quedarse sin el comercio de diamantes que ahora realizan con Suráfrica, y que EE UU corría el peligro de quedarse sin diamantes industriales y otras materias primas básicas, lo que podría arruinar, afirmó, a la industria siderúrgica de este país.
"Señor Regan, a las mujeres de este país les preocupan más los derechos humanos que los diamantes, aunque no se puede decir lo mismo de esta Administración", dijo ayer la congresista demócrata Bárbara Kenelly. "Los diamantes no brillan cuando están manchados de sangre", afirmó el reverendo Jesse Jackson. Para el congresista Mickey Leland, "este comentario machista de Regan es un insulto a la inteligencia de las norteamericanas y demuestra de nuevo la absoluta incomprensión de la Administración por la lucha de 24 millones de negros surafricanos".
Donald Regan ya demostró antes de la cumbre de Ginebra que no tiene pelos en la lengua. En aquella ocasión afirmó que las mujeres norteamericanas no comprenderían el tema de los cohetes nucleares, lo que pasa en Afganistán o los derechos humanos, y que sólo se interesan por los trapos.
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