El espía noruego Treholt intercambió cartas desde la cárcel con un general del KGB

Arne Treholt, el alto funcionario noruego condenado a 20 años de cárcel por espiar para la URSS, ha seguido manteniendo correspondencia desde la prisión con su antiguo contacto del KGB, el general Genadi Titov, según reveló ayer la policía.

"Querido amigo: Gracias por la postal", se lee en una carta que Treholt pretendió enviar en marzo al general Titov, lo que evidencia que el noruego recibió correo de Titov cuando se encontraba en prisión.

"La correspondencia de Treholt era cuidadosamente controlada por los funcionarios de prisiones", dice un jefe de la policía secreta. Dado que tal intercambio epistolar no debía ser posible, la aparición de la carta suscita nuevas dudas sobre posibles fallos en la seguridad.

La misiva de Treholt fue sacada de la cárcel por su amigo, el periodista Egil Ulateig, el mismo que reveló a la policía los planes de la fuga tramada por el conde, nado para el pasado fin de semana. Según Ulateig, la carta estaba impregnada de un tono muy, amistoso y en ella Treholt pedía, a Titov que en la presente "difícil situación" negara que sus encuentros estuvieran relacionados con el espionaje. Treholt había recurrido la condena que le fue impuesta el año pasado y esperaba un nuevo juicio.

El intento de fuga del espía ha llevado a su mujer, la periodista Kari Storaekre, que actualmente trabaja en la televisón sueca, a pedir que le sea concedido "lo más rápidamente posible" el divorcio. Storaekre dice que Treholt quería huir del país llevándose consigo al hijo de ambos, Torstein, de ocho años.