Detenido en San Sebastián un policía acusado de traficar heroína con palomas mensajeras

Un agente del Cuerpo Nacional de Policía, José Montenegro Cebrero, de 28 años de edad, fue detenido el miércoles en San Sebastián acusado de tráfico de heroína en gran escala, entre otras actividades delictivas. Para establecer contactos y transportar la droga empleaba palomas mensajeras. Al policía le fueron incautadas seis metralletas y otras tantas pistolas. El Gobierno Civil de Guipúzcoa no dio ninguna información hasta la publicación de una escueta nota oficial, el viernes por la noche.

El grupo de estupefacientes de la comisaría de San Sebastián, que se encargó de la desarticulación de la banda a la que pertenecía Cebrero, cree que se trataba de una organización muy importante con ramificaciones en la frontera de Irún y en la provincia de Santander. Los investigadores han detenido a otras seis personas y se han incautado en total de 325 gramos de heroína pura. Esta cantidad, una vez adulterada, se hubiera convertido en unas 4.000 dosis, valoradas en el mercado negro en 40 millones de pesetas aproximadamente. La droga fue descubierta en un hueco disimulado en una pared del domicilio del policía detenido y en una jaula de aves.Además del arsenal y de las palomas mensajeras, que Montenegro empleaba para establecer contactos y transportar la heroína desde su vivienda, en el número 4 de la calle de Azpeitia, hasta los presuntos delincuentes, se le han ocupado joyas ocultas en un automóvil presuntamente recibidas a cambio de droga. También se le han bloqueado dos cuentas corrientes con un saldo total próximo a los 20 millones de pesetas.

José Montenegro es natural de Córdoba, está casado y tiene un hijo. Su esposa fue detenida con él, pero más tarde fue puesta en libertad. El matrimonio poseía un perro guardián de gran tamaño y bien adiestrado que le acompañaba en sus paseos. El policía se hacía pasar en el vecindario por empleado de la Telefónica, y su esposa afirmaba trabajar como enfermera.

Los restantes sospechosos, cuya identidad no ha sido facilitada, residen en Zarauz e Irún (Guipúzcoa) y en Pedreña (Santander).

Droga, turismos y dinero

De otro lado, fuerzas de la Policía Nacional y la Guardia Civil aprehendieron 11 kilos de hachís, valorados en unos cinco millones de pesetas, y detuvieron a siete presuntos traficantes de droga en el curso de tres operaciones distintas, desarrolladas en las últimas horas en la zona de Arosa (Pontevedra), informa Xosé María Palmeiro. Uno de los detenidos consiguió huir, a pesar de los disparos de intimidación de los agentes.

Junto con la droga, fueron intervenidos cuatro turismos y unos dos millones y medio de pesetas.

Uno de los detenidos -cuyas identidades no han sido facilitadas-, vecino de Cambados, tiene pendiente juicio por otros dos presuntos delitos de tráfico de droga. Los restantes son vecinos de Moaña, Meaño y Villanueva de Arosa y han pasado a disposición del juzgado de Villagarcía de Arosa.

Las primeras detenciones se realizaron en Curro-Meis el pasado día 18, cuando dos de los detenidos se disponían a cerrar una operación de venta de unos cuatro kilos de hachís. El resto de la droga fue descubierto merced a una "confidencia" que permitió localizar un paquete depositado en las cercanías de La Ermita, en la playa de La Lanzada. El envoltorio contenía 23 bolsas prensadas de hachís, que pesaban unos seis kilos, y fueron valoradas en 2.392.000 pesetas. Hace poco más de un mes fueron localizados en una playa de Pontevedra 50 kilos de hachís en el interior de un bidón.