Un joven, presunto incendiario de tres fábricas en Fuenlabrada
La policía de la localidad madrileña de Fuenlabrada detuvo el pasado día 4 a un empleado de la empresa Zermatt, situada en el polígono industrial de este municipio. El empleado fue acusado de dos intentos de incendio en la misma fábrica y otro, que causó graves daños, en la industria Polimar de dicha población, según informó ayer la Jefatura Superior de Policía de Madrid.
El detenido, Javier Blanco Cuadrado, de 17 años de edad, trabajaba en Zermatt -empresa dedicada a la fabricación de bolsas de plástico, según fuentes oficiosas desde hace ocho meses. La dirección de esta empresa manifestó ayer que no haría declaraciones al respecto. El caso lo instruye el juzgado de Leganés. Blanco Cuadrado, sin antecedentes policiales, fue ingresado en el Centro de Asistencia Psiquiátrica Penitenciaria de Carabanchel.
El detenido fue encontrado en el interior de la fábrica por el encargado, al que no reconoció. Tenía en la mano un recipiente de dos litros de capacidad, vacío, y dos mecheros. Varios bidones de acero que contenían sustancias inflamables habían sido rociados con acetato disolvente. Los bidones no llegaron a arder. El encargado avisó telefónicamente a la policía, que lo detuvo poco después en las inmediaciones. Javier ha declarado, según la información policial, que intentó quemar la fábrica por el trato discriminatorio que recibía por parte de sus compañeros, los cuales lo consideraban como un niño y le gastaban bromas de tipo homosexual, y porque disfrutaba al ver elevarse las columnas de humo. Dos días antes intentó el mismo acto, sobre las 21.30.
El día 3 lo consiguió en otra fábrica, Polimar, donde fue "a probar", según su declaración. Lanzó al interior un cóctel molotov y causó daños valorados en 90 millones de pesetas.
