Paralizado el servicio de autobuses de Barcelona por tercer martes consecutivo

El servicio de autobuses de Barcelona estuvo ayer prácticamente paralizado, por tercer martes consecutivo, al secundar la mayoría de los conductores la huelga convocada por CC OO y el Sindicato Independiente de Transportes (SIT). Los servicios mínimos tampoco fueron respetados en esta ocasión, al estar los trabajadores en desacuerdo con el nivel fijado por la Generalitat. Sólo 12 vehículos prestaron servicio, en una jornada en la que no se registraron incidentes. Los conductores de los autobuses que circularon pertenecen a UGT, sindicato que no respalda la huelga.Al igual que en las jornadas de paro anteriores, se reforzó el servicio del metro barcelonés durante las horas punta, y se registraron abundantes embotellamientos de tráfico por el incremento del uso de los vehículos particulares.

Los representantes de los trabajadores esperan ser convocados por la empresa para reemprender el diálogo que quedó roto en la tarde del lunes, cuando parecía muy posible la desconvocatoria. Las partes tienen ahora el plazo de una semana para aproximar posiciones, pues en principio está convocada una nueva jornada de huelga para el próximo martes.

El conflicto se originó al establecer la empresa un reajuste organizativo que supone que los conductores dejarán de tener un horario fijo y un trayecto inamovible.