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USO ha abonado 8 millones de pesetas de su caja de resistencia

La USO, único sindicato de implantación nacional que tiene establecida caja de resistencia en caso de huelga -a nivel autonómico también la tiene ELA-STV-, ha abonado a lo largo de 1985 y 1986 en torno a ocho millones de pesetas a sus afiliados que participaron en paros o fueron despedidos por motivos sindicales, según manifestó ayer Manuel Zaguirre, secretario general de USO, al presentar el IV Congreso Confederal del sindicato, que se celebrará en Castelldefels (Barcelona), los próximos días 11, 12 y 13 de abril. La caja de resistencia de USO, sistema establecido en otros sindicatos europeos, se hace cargo del 65% del salario mínimo interprofesional de los trabajadores en huelga afiliados al sindicato, porcentaje que va incrementándose a medida que se prolonga el conflicto. También se hace cargo de las prestaciones de aquellos trabajadores despedidos por motivos sindicales mientras dura la tramitación de su juicio en Magistratura de Trabajo.La caja se puso en funcionamiento con carácter experimental en enero de 1985. Durante 1985 y los meses transcurridos en 1986 se han abonado en torno a ocho millones de pesetas para atender 50 despidos y a unos 15.000 afiliados de USO afectados por huelga. El mayor pago efectuado corresponde a Ensidesa. En este caso se han satisfecho cinco millones de pesetas a 1.400 afiliados por siete días de huelga. La caja se nutre de la cuota de los militantes.

El IV Congreso de USO, que, entre otras cosas, tendrá, precisamente, que aprobar el funcionamiento de la caja de resistencia, coincide con el 25 aniversario de este sindicato.

USO, según Zaguirre profundizará su línea de autonomía sindical y tratará de reforzar su crecimiento. Actualmente cuenta con 50.000 cotizantes y al congreso asistirán 460 delegados con voz y voto y numerosas representaciones de otras organizaciones sindicales vinculadas a la Confederación Mundial del Trabajo, a la que USO está adherida.

Función pública

Una de las áreas en las que USO pondrá mayor énfasis es en la función pública:en la que existen más de 1.000 organizaciones y cuyas elecciones sindicales podrían celebrarse este mismo año.Manuel Zaguirre señaló que el debate planteado en algunas organizaciones sobre la politización no tenía sentido en USO, ya que en toda Europa los sindicatos tienen un peso político que les viene de su propia fuerza. Al mismo tiempo, anunció que el sindicato que lidera quiere aumentar sus servicios a los trabajadores y, por ello, en este congreso se facultará a la nueva ejecutiva para que estudie la posibilidad de implantar un fondo de pensiones sindical.

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