La Cruz Roja suspende una huelga, tras un bombardeo israelí del sur de Líbano
La Cruz Roja Libanesa suspendió al mediodía de ayer la huelga que había iniciado cinco horas antes para atender a las víctimas de un bombardeo israelí sobre posiciones palestinas en las cercanías de Sidón, tercero en este año. Entre ocho y 10 aviones israelíes arrojaron una veintena de bombas de 500 kilos de peso sobre cinco edificios que, según Tel Aviv, eran sedes de Al Fatah, el principal grupo de la OLP, que encabeza Yasir Arafat. Dos personas murieron y seis resultaron heridas.
El ataque aéreo se produjo hacia las 11.45 (hora peninsular española) y tuvo como objetivos cinco locales presuntamente usados por Al Fatah en los campos palestinos de Ain el Helue y Mieht-Mieh y en el pueblo libanés de Fauar. Como es habitual, los aviones F-16 de Israel sortearon sin problemas la anticuada defensa antiaérea de los fedayin y golpearon con precisión sus objetivos.
Al conocer la noticia de la incursión aérea, los socorristas de la Cruz Roja del área de Sidón suspendieron temporalmente la huelga que en todo el territorio libanés habían iniciado a las siete de la mañana. Salvo ese paréntesis, el paro fue seguido por los 900 socorristas de la Cruz Roja Libanesa. Era la primera vez que la institución recurría a una medida tan contraria a su espíritu.
