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POLÉMICA PARLAMENTARIA

Las palabras "en la Cámara" se recogieron, asegura el jefe de los taquígrafos

Anabel Díez

A. D.El director de asistencia técnica parlamentaria, el letrado Manuel Gonzalo, de quien depende el cuerpo de taquígrafos, contradijo la versión dada momentos antes por el vicepresidente primero del Congreso, Leopoldo Torres, sobre en qué momento del proceso se habían omitido las tres palabras del presidente del Gobierno en el de bate sobre política exterior. Manuel Gonzalo aseguró que la transcripción correcta sí figuraba en las notas taquigráficas.

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Nota del presidente del Congreso

"Los taquígrafos lo recogieron así como en su traducción a caracteres ortográficos; fue después, al mecanografiarlo por una persona del departamento de redacción del diario de sesiones cuando se omitieron por error", aseguró Gonzalo. Este letrado declinó dar a conocer la identidad de los taquígrafos que intervinieron en esta sesión, alegando el nerviosismo que embargaba en general a estos profesionales por las afirmaciones que se estaban haciendo respecto a su pericia profesional."Los taquígrafos no recogieron las palabras", afirmó el socialista Leopoldo Torres. Se le recordó al vicepresidente de la Cámara Baja que eran tres las personas encargadas de recoger el debate. "Ya lo sé, pero ninguna las recogió", reafirmó.

Por su parte, el presidente del Congreso de los Diputados, Gregorio Peces Barba, asumió ayer la responsabilidad "única" del "error material por omisión" detectado por el Grupo Popular en las actas taquigráficas del debate sobre política de seguridad, celebrado el 4 de febrero, en las que se omitieron las palabras .en la Cámara". Estas palabras suponían el final de la frase del presidente del Gobierno, Felipe González, que, dirigiéndose a Fraga, dijo: "Ha hecho una afirmación o argumentación que ya le he oído decir públicamente en varias ocasiones: se va a discutir el Plan de Defensa Nacional, se va a discutir el PEC en la Cámara".

El servicio de taquígrafos del Congreso negó ayer "cualquier manipulación o intencionalidad en la omisión de estas palabras al reflejar la intervención del presidente del Gobierno", según aseguraron algunos de estos profesionales que no negaron el malestar existente en el colectivo. El jefe del servicio de redacción del diario de sesiones, Braulio Bravo, asumió desde el primer momento toda responsabilidad sobre lo ocurrido. Posteriormente esta asunción se elevó al presidente del Congreso, Gregorio Peces Barba, que no admitió que se produjera duda alguna sobre la profesionalidad y honorabilidad de los taquígrafos.

Pero la confusión se hizo patente cuando tanto Bravo como Leopoldo Torres, apelaron a los "ruidos, abucheos y aplausos" que se registran en la Cámara para justificar que no se hubieran apreciado con nitidez estas palabras.

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El portavoz del Grupo Popular, Miguel Herrero, se apresuró a aclarar, tras examinar el vídeo de la sesión, que en ese momento no se registró ninguna de estas manifestaciones. La veracidad de esta afirmación de Herrero pudo ser constatada al escuchar cintas magnetofónicas del momento en el que el presidente del Gobierno, Felipe González, pudo hablar sin ninguna interrupción.

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Sobre la firma

Anabel Díez
Es informadora política y parlamentaria en EL PAÍS desde hace tres décadas, con un paso previo en Radio El País. Es premio Carandell y Josefina Carabias a la cronista parlamentaria que otorgan el Senado y el Congreso, respectivamente. Es presidenta de Asociación de Periodistas Parlamentarios (APP).

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