Educación inicia la integración escolar de 3.000 millones calés

La dirección provincial de Educación ha puesto en marcha un programa cuyo objetivo es conseguir la escolarización de los aproximadamente 3.000 niños gitaños que aún no la tienen asegurada en la ciudad de Madrid, al tiempo que se intenta reducir el absentismo y el fracaso escolar entre estos alumnos.Para que el programa tenga éxito, explica Antonio Muñoz, jefe del servicio de renovación pedagógica de la Dirección Provincial de Educación, no basta con asignar puestos escolares a cada niño, para lo que hay ya plazas suficientes. Es imprescindible motivar a sus familias, primero para que envíen a los niños al colegio y luego para que no interrumpan los estudios al llegar a la edad de 11, 12 o 13 años. Para conseguir esto hay que mejorar asimismo las condiciones de vivienda, trabajo y sanidad de las familias.

"Es importante", añadió Muñoz, "encontrar los motivos reales que pueden llevar a los niños gitanos a la escuela. Se ha detectado un mayor interés entre los jóvenes por aprender a leer y escribir, por la sencilla razón de que les resulta imprescindible para obtener el carné de conducir".

En 55 colegios públicos repartidos por todo Madrid se matricularon a principios de curso 1.132 alumnos gitanos, de los que pronto dejaron de asistir a clase 148. Entre los restantes 984 el nivel de absentismo habitual ronda el 20%, un índice muy elevado. Una de las novedades del programa iniciado consiste en la formación de 20 monitores de raza gitana, personas con prestigio en sus colectivos que puedan actuar de mediadores entre la población y las autoridades administrativas y escolares.

El programa tratará de reducir el absentismo y el abandono del colegio por los niños pasados unos años. Sí esta práctica no puede ser eliminada, está en estudio la posibilidad de formar maestros itinerantes, un tipo de profesor de fuerte componente vocacional que acompañaría a los niños que abandonen la escuela para ir a la vendimia y otros trabajos temporales.

Los colegios elegidos serán reforzados con material escolar, bibliotecas de aula y el envío de profesores de apoyo encargados de ayudar a los niños que presentan retraso en sus estudios, sean gitanos o no, aunque son aquéllos los que presentan problemas mayores. El programa prevé también el reciclaje de profesores para que se especialicen en educación compensatoria, lo que requiere métodos particulares,

En Madrid trabajan actualmente 47 profesores de apoyo, en colaboración con otros 30 especialistas en educación compensatoria.