Ruiz-Mateos, reitera en el careo que entregó 1.000 millones de pesetas a Valls Taberner
José María Ruiz-Mateos, ex presidente de Rumasa, aseguró que Luis Valls Taberner, presidente del Banco Popular, le había pedido 1.000 millones de pesetas para solucionar los problemas que aquél tenía con el Banco de España, según ratificó en un tenso careo mantenido ayer ante el juez de delitos monetarios, Luis Lerga. El dinero fue entregado a Antonio Navalón, ex consejero de Ruiz-Mateos -en metálico, e introducido en unas cajas-, en una puerta del Palacio de Deportes de Madrid, según afirmó Ruiz-Mateos.
Las afirmaciones de José María Ruiz-Mateos -miembro del Opus Dei, al igual que Valls- sobre la hipotética entrega de los 1.000 millones de pesetas al presidente del Banco Popular fueron desmentidas rotundamente por Luis Valls en el transcurso del careo, aunque posteriormente, ante los periodistas, indicó que podría estar refiriéndose a las aportaciones, en forma de créditos o préstamos, que todos los bancos hicieron a los partidos políticos para cubrir las elecciones autonómicas y generales que se realizaron en 1982.El Banco Popular, señaló Valls, concedió 2.000 millones de pesetas a cinco partidos en las elecciones generales y a ocho en las municipales; otra cosa es, señaló, que se recuperen o no estas cantidades, "nosotros hemos logrado cobrar". Para Luis Valls, "la distancia entre créditos y subvenciones a partidos políticos es muy difusa, porque se sabe tarde si se va a cobrar o no".
Los 1.000 millones en metálico estaban contenidos en unas cajas que fueron entregadas en distintas ocasiones a Antonio Navalón, según afirmó con rotundidad el ex presidente de Rumasa a lo largo del careo con su ex consejero, quien señaló, por su parte, que el contenido de dichas cajas eran documentos y que la entrega se había realizado en una puerta del Palacio de los Deportes, porque se encontraba muy cerca de su domicilio particular y del despacho.
José María Ruiz-Mateos declaró en el careo que los hipotéticos 1.000 millones de pesetas los había sacado aprovechando la compra de Galerías Preciados, realizada en la segunda mitad de 1981, y que dio ese dinero "para parar la ofensiva que en el Banco de España había contra Rumasa". El ex presidente del holding de la abeja señaló que tenía pruebas de todo ello y que las sacaría a la luz. Tanto Antonio Navalón como Luis Valls afirmaron que la cuestión de los 1.000 millones de pesetas era una imaginación de Ruiz-Mateos.
José María Ruiz-Mateos aseguró en el careo que pidió consejo a Luis Valls sobre qué debería hacer una vez que se decretó la expropiación y se había iniciado el proceso judicial sobre sus posibles responsabilidades, y que el presidente del Banco Popular le había contestado: "Si yo estuviera en tu lugar, me iba a Londres". Luis Valls, por su parte, declaró que él le aconsejó que se fuera porque le habían cerrado su despacho, y no porque se hubiera iniciado una causa penal contra Ruiz-Mateos. Según Valls, Ruiz-Mateos debía buscar un sitio desde donde pudiera seguir atendiendo sus negocios, alejado de Madrid y fuera de las numerosas llamadas de apoyo o condena que pudiera recibir.
"Tenso y desagradable"
Los careos con Luis Valls y Antonio Navalón se produjeron a través de la mediación del juez Lerga, quien preguntaba a uno u otro sobre las distintas afirmaciones del contrario, llegando a concretar mucho las cuestiones. El careo fue calificado de tenso y desagradable, aunque no hubo especiales momentos de crispación.El presidente del Banco Popular manifestó que "no he perdido el afecto que tenía por Ruiz-Mateos, porque supongo que el show tiene importancia en su estrategia defensiva". El encuentro entre Luis Valls Taberner y José María Ruiz-Mateos en los pasillos del juzgado de delitos monetarios fue uno de los momentos desagradables, ya que el primero se acercó y tendió su mano diciendo: "José María, ¿cómo te encuentras?", a lo que el empresario jerezano contestó: "Mal", y le dio la espalda.
El juez Lerga hizo preguntas para evitar que pudieran darse dobles sentidos. Como ejemplo, Lerga preguntó: ¿Niega usted rotundamente que haya habido dinero?" O a Navalón, a quien preguntó: "¿En la puerta del Palacio de los Deportes, no cogió usted el dinero?"
El presidente del Banco Popular señaló a la salida del juzgado que todo era una comedia y que José María Ruiz-Mateos "es un gran actor, un autor teatral que ha escrito su libreto". Luis Valls manifestó que "el careo había sido sencillo, porque las partes se habían ratificado en sus versiones". Valls hizo suya la frase de Dante -"una mentira escondida en una bella verdad"- para referirse a la actitud de Ruiz-Mateos.
