Un juez obliga a la compañía Kodak a abandonar la fotografía instantánea

La compañía Eastman Kodak ha perdido ante los tribunales una importante batalla por mantenerse en el negocio de la fatografia instantánea. Desde ayer, la principal compañía productora de película fotográfica a nivel mundial deberá dejar de fabricar y vender películas y cámaras instantáneas, y acatar una sentencia de un juez de Boston que estableció que la compañía ha violado siete patentes de la compañía rival Polaroid.La batalla legal entre las dos compañías comenzó en abril de 1976, seis días después de que Kodak lanzara al mercado sus cámaras y películas instantáneas. Kodak continuará su lucha en los tribunales, ya que en caso de perder definitivamente el caso debería pagar una indemnización a la compañía Polaroid, que algunos comentaristas calculan que puede oscilar entre los 1.000 o 2.000 millones de dólares.

La compañía Kodak alegó, en un recurso para evitar la entrada en vigor de la sentencia del juez de Boston, que el cierre de la división de películas instantáneas de la firma podía suponer que un importante negocio quedara inevitable e indefinidamente en régimen de monopolio.

Un portavoz de la compañía señaló que se acataría la sentencia y que se detendría la producción, distribución y comercialización de todos los productos instántáneos. La compañía indicó, sin embargo, que no sería económicamente rentable cerrar completamente esta división de productos y luego abrir de nuevo, en caso de que la compañía gane su recurso. El cierre, en opinión del presidente de la compañía, costará a Kodak 200 millones de dólares, más de 30.000 míliones de pesetas.

Un 5% de su producción

La división de fotografia instantánea supone el 5% de la actividad de Kodak. El resultado de su recurso ante el tribunal de Washington puede tener una importante repercusión económica. Los analistas consideran que el hecho de que no se haya aplazado la entrada en vigor de la sentencia del juez de Boston deja pocas esperanzas a los ejecutivos de Kodak.Según los expertos, Polaroid puede pedir una indemnización de hasta 2.000 millones de dólares, unos 305.000 millones de pesetas al cambio actual. La decisión dependerá de que el juez decida si existió mala fe o no en la violación de los derechos de patente de Polaroid.

El presidente de la compañía Polaroid, William McCune, se mostró satisfecho, aunque no quiso adelantar cuál será el resultado final de su demanda contra Kodak.

El mercado de la fotografía instantánea comenzó a disminuir en 1978, con la aparición de una nueva generación de cámaras de 35 milímetros, más manejables para el gran público.

Kodak ha declarado que ha vendido 16,5 millones de cámaras de fotografía instantánea, las cuales sólo pueden emplear películas Kodak, que dejará de fabricarse. Para evitar perjuicios a sus clientes, la compañía ha anunciado que está estudiando el canje de las cámaras instantáneas por sus nuevas cámaras de disco.