Wilma P. Malnkiller

Una mujer, hija de padre cherokee puro y madre blanca, Wilma P. Mankiller, de 40 años, ha sido nombrada gran jefa de una de las mayores tribus indias americanas. El pasado sábado juré su nuevo cargo en una breve ceremonia celebrada ante el consejo tribal, formado por 15 miembros. A continuación prometió seguir los esfuerzos por el desarrollo económico de la tribu. Lo que preocupa a su pueblo, dijo, son "los puestos de trabajo y la educación, no si la tribu la dirige una mujer o un hombre".

La ceremonia, que tuvo lugar en la elegante sede del Consejo Cherokee, se celebró sin el ritual indio. La jeta Mankiller, cuyo apellido significa literalmente matahombre, llevaba un traje negro y una biblia. Según la presidencia de la Asociación Nacional de Tribus, hay al menos 29 mujeres que dirigen pueblos indios, pero ninguna está al frente de una tribu tan grande.La nación cherokee es la segunda en importancia, detrás de los nava os. Cuenta con 67.000 miembros registrados, la mayoría de los cuales vive en 14 distritos en el noreste de Oklahoma. Una parte pequeña permanece en Carolina del Norte.

La jefa Mankiller, que hasta entonces ocupaba la vicejefatura, fue automáticamente elevada al nuevo cargo tras la dimisión del gran jefe anterior, Ross O. Swimmer, que llevaba 10 años en el puesto y que ha pasado a encargarse de la vicesecretaría del Interior para Asuntos Indios, en Washington.

Swiminer, que en política es republicano, ha intentado que los indios dependan menos del Gobierno federal. Wilma Mankiller, que es demócrata liberal y ha tomado parte en protestas por la situación de los indios, está de acuerdo con la línea trazada por su antecesor y ha declarado que seguirá el mismo camino. A pesar de las amplias diferencias ideológicas, ambos líderes vienen trabajando juntos desde 1983.

Los cherokees son hoy una de las tribus más progresistas. Bajo el liderazgo de Swiminer, abogado y banquero, la tribu abrió gran número de negocios, entre ellos un motel y un restaurante, un invernadero, un rancho dedicado a la ganadería y a la cría de aves de corral y una firma comercial dedicada a la fabricación de material electrónico. Sin embargo, como en la mayoría de las tribus indias, los cherokees tienen actualmente graves problemas de desempleo.

Su cuartel general se encuentra en una urbanización moderna de Tahlequah, la antigua capital de los cherokees de Oklahoma. La principal función del Gobierno tribal es administrar los 20 millones de dólares de ayuda estatal y federal para programas de sanidad, vivienda y educación.

Wilma Mankiller nació en una pequeña comunidad de Rocky Mountain, Oklahoma, pero su familia se trasladó a San Francisco cuando ella tenía 11 años. Las protestas indias harían renacer su interés por sus raíces étnicas. En 1974 se divorció de su marido, de nacionalidad ecuatoriana, y volvió a Oklahoma. Su formación universitaria le fue de gran utilidad para el trabajo social que desde entonces empezó a desarrollar en ayuda de su tribu.

Vive en una pequeña casa de madera en Rocky Mountain con tres perros y muchos libros de filosoria y economía. Según ha declarado, los prejuicios que en un primer momento sintieron hacia ella algunos cherokees tradicionales han disminuido.

En la conferencia de prensa que dio el día de su toma.de posesión dijo que intentaría que se instalasen en su comunidad empresas "responsables", que contasen con un historial limpio en materia de medio ambiente. Añadió que en ningún caso recurnra a abrir bingos, como han hecho otras tribus: "No creo que el bingo pueda proporcionarnos una economía estable; prefiero hacer cosas más duraderas".