Los socialdemócratas, claros ganadores en las elecciones municipales de Portugal
El Partido Socialdemócrata portugués (PSD) confirmó y reforzó en las elecciones municipales del domingo la victoria alcanzada en los comicios legislativos de octubre último. Cuando se había escrutado un tercio de los votos, el PSD totalizaba el 36% de los sufragios, contra el 26% del partido socialista, 16% del partido comunista, 13% del Centro Democrático Social (CDS) y 4% del Partido Renovador Democrático (PRD).
La lectura de los resultados es más clara en relación a los comunistas, que habían alcanzado el 20,7% de los votos en las elecciones municipales de 1982, ya que las alianzas no oficiales entre socialdemócratas, socialistas y democristianos para los comicios de ayer hacen que muchos resultados atribuidos a los socialistas, a los socialdemócratas o aun a los democristianos sean en realidad el resultado de la acumulación de los votos de los tres partidos.En líneas generales, la alianza Pueblo Unido (comunistas) ha aguantado bastante bien las santas alianzas constituidas contra ella y aún la competencia del del Partido Renovador Democrático, que no recobra el apoyo electoral de hace menos de dos meses: para alcanzar un resultado equivalente al de octubre último, el PRD debería totalizar el 6% de los votos, pero esta vez se presentaba en apenas un tercio de los distritos electorales.
A pesar de una ligera recuperación en relación a los comicios legislativos, en que obtuvo el 20% de los votos, el Partido Socialista es el gran derrotado del escrutinio de ayer, ya que los únicos puntos donde registra una progresión es gracias al respaldo de los partidos situados a su derecha.
En Lisboa, donde el PRD no se presentaba, el Partido Socialista retrocede en relación a las anteriores municipales y cede el segundo lugar a los comunistas, mientras que socialdemócratas y democristianos, aliados entre sí, amplían su base electoral y consiguen, por vez primera, la mayoría absoluta.
La conquista de Oporto
Los socialistas no consiguen tampoco su mayor objetivo en los comicios de ayer: la conquista del Ayuntamiento de Oporto. La segunda mayor ciudad portuguesa tendrá, en los próximos años, un alcalde socialdemócrata.
Si es cierto que el PRD no se presentaba en muchos de los mandatos en disputa, su posición relativa, en los colegios donde presentaba candidatos, muestra un retroceso, del tercero al cuarto lugar.
Las abstenciones -de cerca del 40%, contra un 29% en las anteriores elecciones municipales de 1982- constituyen un recorte en relación a los 12 comicios realizados en Portugal en los últimos 10 años. Así, la jornada electoral estuvo caracterizada por el buen tiempo en todo el país y por algunos casos de boicoteo colectivo ya tradicionales en localidades del norte de Portugal. Este fenómeno es fuente de preocupación para los 12 partidos o coaliciones y para los más de 200.000 candidatos a los 50.000 puestos en juego.
Un alcalde confesaba ayer que "Ias alianzas, no oficiales, pactadas a nivel estrictamente local no han sido bien asimiladas por los sectores menos politizados".
