Tres semanas de incertidumbre

La aparición del cadáver de Mlkel Zabaltza, de 32 años, en aguas del río Bidasoa puso fin ayer a la incertidumbre sobre el paradero de quien ya había sido calificado incluso como desaparecido. Las autoridades judiciales investigan ahora en qué circunstancias concretas se produjo el fallecimiento de Zabaltza, que fue detenido en la madrugada del pasado día 26 de noviembre por fuerzas de la Guardia Civil.Los principales hechos ocurridos desde entonces han sido los siguientes:

26 de noviembre: Mikel Zabaltza, según la versión oficial, huye de la Guardia Civil, esposado, cuando se disponía a reconocer un hipotético zulo (escondite de armas) en el término de Endarlaza (Navarra).

29 de noviembre: Una hermana de Mikel Zabaltza presenta denuncia por presunta desaparición de éste ante el Juzgado de Instrucción número 1 de San Sebastián, cuyo titular, Francisco Ríos, insta a la Guardia Civil a que facilite los datos sobre detención y circunstancias en que se produjo la fuga.

30 de noviembre: Petición formal del Juzgado de Instrucción número 1 de San Sebastián a los mandos de la Guardia Civil de la provincia exigiendo la aportación por escrito y cuanto antes de la información relacionada con el paradero de Mikel Zabaltza.

3 de diciembre: El Partido Nacionalista Vasco y Euskadiko Ezkerra hacen pública su preocupación por la desaparición de Zabaltza. La Coordinadora de Guardias Civiles de Intxaurrondo telefonea a dos periódicos de Barcelona y apunta la posibilidad de que Mikel Zabaltza haya muerto a consecuencia de presuntas torturas.

4 de diciembre: Una nota del Gobierno Civil de Guipúzcoa precisa que Zabaltza fue detenido como sospechoso de colaborar o pertenecer a ETA, y que su detención fue comunicada al juzgado en la forma en que señalan las leyes.

6 de diciembre: Tras informar la Guardia Civil al juez de que Zabaltza desapareció en un lugar "que constituye un gran peligro para todas aquellas personas que desconozcan la zona", el juez Ríos expone en conferencia de prensa sus dudas acerca de que Zabaltza pudiese nadar esposado.

7 de diciembre: Orden del juez de dragar un tramo del río Bidasoa, en Endarlaza. Los familiares del joven manifiestan que no se creen la versión oficial y expresan sus temores acerca de su suerte.

9 de diciembre: Idoia Ayerbe Iríbar, novia de Míkel Zabaltza, declara que vio a su compañero en el cuartel de Intxaurrondo. Estaba, afirmó, "con las manos atadas, supongo que esposado, y con una bolsa de plástico amarilla metida en la cabeza".

10 de diciembre: Suspensión del rastreo del Bidasoa tras una infructuosa búsqueda del desaparecido.

11 de diciembre: El juez Francisco Ríos cita a declarar al teniente coronel Francisco Galindo, máximo responsable de la Guardia Civil de Guipúzcoa.

12 de diciembre: Visita del juez al cuartel de Intxaurrondo, tras anunciarlo con 15 minutos de antelación. No hay registros de entradas y salidas de detenidos.

13 de diciembre: Expedientados los tres guardias civiles que acompañaban a Zabaltza el día en que desapareció.