80 delegados niegan validez al congreso extraordinario de UGT de minería de León

Ochenta delegados mineros de UGT de la comarca de El Bierzo, de un total de 84, decidieron ayer en Ponferrada, en una asamblea presidida por los cuatro miembros de la comisión gestora minera provincial, invalidar el congreso extraordinario celebrado el pasado lunes, por considerar que, estatutariamente, la representatividad de los asistentes (cerca de 50 miembros de Ponferrada, Laciana, Toreno y Sabero) no era suficiente para un congreso de estas características.

El congreso -donde se eligió una nueva ejecutiva de la federación provincial minera, que suspendió el apoyo a la huelga general-, fue convocado, con carácter urgente, de forma unilateral por el presidente de la gestora provincial Ricardo Conde, y contó con el beneplácito del SOMA-UGT y del diputado socialista por León, Conrado Alonso Buitrón, quien no ha ocultado su abierta oposición al secretario general de la federación estatal minera de UGT, José Antonio Saavedra.La asamblea de delegados mineros votó de forma unánime secundar la huelga general convocada para los días 17 y 18 de este mes por CC OO y UGT. Los miembros de la comisión gestora manifestaron que al congreso, calificado como "una reunión de amigos", los delegados asistieron "engañados", conexcepción de los representantes de Laciana, y reiteraron su intención de continuar su mandato "sin la figura del presidente", hasta el próximo congreso ordinario.

Eumenio Fernández Monteira, secretario comarcal de El Bierzo de UGT y miembro de la gestora, anunció una próxima reunión con el secretario confederal de organización, Antón Saracíbar, de quien aseguraron tener su apoyo. Fernández Monteira no descartó la expulsión "temporal o definitiva de los tres promotores" de la grave escisión producida en la UGT de minería de León: Ricardo Conde, Conrado Alonso Buitrón y Pedro Fernández; éste último, delegado minero de Laciana y, según fuentes sindicales, posible candidato socialista al Senado en las próximas elecciones.

Por su parte, Conde negó que en congreso extraordinario se hubiera acordado enviar a José Antonio Saavedra a la comisión de conflictos, puntualizando que tan sólo se mandató a la comisión ejecutiva para que "a tenor del contenido de los estatutos, consulte la posibilidad de exigir responsabilidades por las actuaciones de la ejecutiva federal, y, en particular, de José Antonio Saavedra". Conde reconoció ciertos "errores de forma", en la convocatoria del congreso.