Los socialistas mantienen la prohibición de que los policías puedan hacer huelga

Los miembros de la policía tendrán prohibido el ejercicio del derecho de huelga, al mantenerse, con los votos en solitario de los diputados del PSOE, el texto del proyecto de la ley de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado redactado por el Gobierno, cuyo debate comenzó ayer en la Comisión de Justicia e Interior del Congreso de los Diputados. En la jornada de trabajo de ayer, tan sólo se aprobaron los siete artículos que constituyen el título 1 del proyecto de ley orgánica de Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado. Las tesis de las minorías, que solicitaban una expresa limitación judicial al secreto profesional de los policías, no prosperaron.

Durante dos horas se debatió, en un clima de tensión dialéctica creciente, el artículo 5.,8 del proyecto de ley policial del Gobierno, que hace referencia a la negativa al ejercicio del derecho de huelga para los policías. La decisión sobre este derecho fue calificada por Josep María Trias, de Bes, portavoz de la Minoría Catalana, como una "cuestión de Estado".Juan María Bandrés, portavoz de Euskadiko Ezkerra (EE), manifestó: "No podemos pedir a los efectivos policiales, cuya misión es la defensa de los derechos y libertades de los ciudadanos, que renuncien a sus propios derechos".

"Queremos", dijo Bandrés .ser coherentes con la ley orgánica de libertad sindical y con la Carta Social Europea (ratificada en 1980), y, por tanto, reconocer el derecho de huelga a los policías".

Modesto Fraile, diputado del Partido Demócrata Popular (PDP), indicó que el artículo 28 de la Constitución establece el derecho de huelga para los trabajadores.

"En consecuencia", dijo, "no podemos negar un derecho constitucional, aunque, eso sí, con las preceptivas limitaciones que garanticen los servicios mínimos policiales a la sociedad".

Julio Busquets, portavoz del PSOE, argumentó la posición negativa de su grupo parlamentario al derecho de huelga en la policía. Busquets consideró que en el sector servicios existen restricciones a los derechos sindicales, "limitaciones que han de agrandarse en el caso policial por su propia peculiaridad".

Secreto "inadmisible"

Por otra parte, a excepción de populares y socialistas, los demás grupos parlamentarios intentaron introducir en el proyecto de ley la limitación del secreto profesional para los policías cuando así lo exija el juez.

Fernando Pérez Royo, portavoz comunista, manifestó que "es inadmisible el secreto y la ocultación de datos a jueces y tribunales".

Denunció Pérez Royo a continuación la práctica que permite que la policía tenga chivatos o confidentes como un coto privado, sin que la autoridad judicial pueda conocer sus informes.

El portavoz socialista consideró que el secreto profesional está limitado por la decisión judicial, ya que en la ponencia se introdujo en el texto enviado por el Gobierno la salvedad que "las disposiciones de la ley impongan"

Busquet argumentó que el secreto profesional protege la intimidad y el honor de las personas, ya que los policías pueden conocer datos personales que si los divulgasen rayarían en la ilegalidad. Por último, fueron aprobados los artículos sexto y séptimo del proyecto de ley.

Señalan que "la Guardia Civil sólo tendrá consideración de fuerza armada en el cumplimiento de las decisiones de carácter militar que se le encomienden".

A ello el portavoz del Partido Nacionalista Vasco, Marcos Vizcaya, respondió anunciando que su grupo se opondrá a lo largo del debate del articulado de la ley a toda referencia que haya en el proyecto del carácter militar de la Guardia Civil.