Mitterrand anuncia la participación simbólica de Francia en el Avión de Combate Europeo

El presidente François Mitterrand anunció ayer, al término de sus entrevistas con el canciller de la República Federal de Alemania (RFA), Helmut Kohl, que Francia participará simbólicamente en el proyecto de construcción del Avión de Combate Europeo (ACE), del que se había retirado hace escasos meses. Mitterrand señaló que ha dirigido una carta a todos los países comunitarios, más España y Portugal, en la que presenta un proyecto para planificar en los próximos años la industria aeronáutica europea y evitar polémicas como la que ha rodeado al ACE.

El único país que ha contestado hasta ahora es España, que se ha declarado de acuerdo con la propuesta de París, según informó la agencia Efe. El presidente francés explicó que los problemas se plantean porque unos países necesitan reemplazar antes sus aviones de combate pesados, caso de la RFA, Italia o el Reino Unido, mientras que otros, como Francia, tienen más prisa por modificar sus aviones ligeros. La solución, según él, es aproximar paulatinamente las fechas de reemplazo de los dos tipos de aviones, de forma que sea posible desarrollar coordinadamente nuevos modelos.Para demostrar su buena voluntad, Mitterrand anunció que Francia participará con un 5% o un 10% en la construcción del nuevo ACE, sin exigir a cambio ninguna modificación en el tipo de avión ideado por sus socios. Su gesto llega escasamente 48 horas después de que el canciller Kohl anunciara, por su parte, que el Gobierno alemán facilitará fondos públicos para financiar Eureka.

Los dos políticos se mostraron "muy satisfechos" con los resultados de la reunión de Hannover, en la que se aprobó la Carta Fundacional de la Europa de la Tecnología, aunque Kohl no quiso pronunciarse públicamente sobre la oferta de Mitterrand de que el secretariado permanente -que según dicha Carta será "pequeño y flexible"- se instale en la ciudad francesa de Estrasburgo.

El presidente francés explicó que no es posible ni conveniente alejar dicho secretariado de la Comisión Europea (órgano ejecutivo de la CEE), pero que tampoco podían vincularse estrechamente porque en Eureka participan numerosos países que no son miembros del Mercado Común.

Éxito del 'airbus'

El canciller alemán se mostró receptivo en cuanto a las propuestas francesas. Helmut Kohl puso un gran interés en resaltar la satisfacción de su país por el éxito del airbus, un avión de transporte de pasajeros y mercancías construido conjuntamente por varios países europeos que está ofreciendo una dura competencia a los Boeing norteamericanos. Kohl afirmó que cuando él llegó a la cancillería muchas personas se mostraban reacias al proyecto, pero que el tiempo ha demostrado que la inversión merecía la pena. Tanto Kohl como Mitterrand se mostraron de acuerdo en la necesidad de garantizar la continuidad del airbus mediante la fabricación en los años noventa de nuevos modelos de la serie.La cumbre franco-alemana estuvo también centrada en la preparación del Consejo Europeo (reunión de jefes de Estado y de Gobierno de los países miembros de la CEE), prevista para los próximos 2 y 3 de diciembre en Luxemburgo. Los dos políticos explicaron que habían intercambiado ideas, sobre el perfeccionamiento del mercado interno de la Comunidad y la ampliación de poderes del Parlamento Europeo, dos de los principales temas a discutir en Luxemburgo.

Mitterrand desmintió que vaya a entrevistarse con el presidente norteamericano antes de la celebración de la cumbre, Reagan-Gorbachov. "Francia no estará presente en Ginebra, y aunque, obviamente, estamos muy interesados y somos conscientes de que los acuerdos soviético-estadounidenses nos afectan a todos, no hay ninguna razón para que nos veamos en esas fechas concretas", explicó. Francia, añadió Mitterrand, acostumbra a "expresarse directamente" cuando asume responsabilidades internacionales.