Más sobre 'Salgamos de la OTAN'

Se nos ocurren dos posibles razones como fuente de inspiración de la carta de la catedrática Carmen Iglesias, publicada en esta misma sección el pasado día 19 y en la que denuncia una manipulación de su firma en relación al manifiesto titulado Salgamos de la OTAN.Por un lado, una desmedida preocupación por su nombre, rayana en el egocentrismo, que le hace creer que es la única persona en este país que se llama Carmen Iglesias y se dedica a la enseñanza. Para su información y tranquilidad hemos de decirle que la firmante del anuncio Salgamos de la OTAN, promovido por las diferentes organizaciones que forman la Coordinadora Estatal de Organizaciones Pacifistas, es una persona que, con el mismo nombre y profesión -ejerce la docencia en el colegio nacional San Bernabé de Logroño-, dio su firma a través del Colectivo Riojano para la Paz y el Desarme (Cripaz). Esta coincidencia hubiera podido ser aclarada fácilmente de no ser -y aquí viene la otra posible razón- porque esta señora de Madrid ha creído encontrar una oportunidad de oro para intentar desprestigiar a todas aquellas personas y organizaciones que nos manifestamos claramente partidarias de salir de la OTAN. Hubiera sido más elegante y honesto por su parte defender públicamente su propia posición al respecto y ahorrarse toda

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esa literatura panfletaria, más propia de una reacción extraña y exageradamente defensiva (no hace daño quien quiere, sino quien puede) que de una actitud ponderada y basada en el conocimiento de la realidad. Es muy grave, doña Carmen, que una persona como usted, que tan altas responsabilidades tiene en la docencia, pierda los papeles con tanta facilidad.

Las organizaciones que trabajan por la paz no requieren de trampas ni demagogias para convencer y librar sus batallas, porque, afortunadamente, son muchísimas las personas que las conforman y que apoyan sus objetivos.

Finalmente, como ocurre que, quien acusa tiene la obligación moral y legal de demostrar su acusación, so pena de verse obligado a rectificar públicamente, le instamos a aclarar qué amigos o conocidos suyos han visto manipulados sus nombres en cualquier actividad o manifiesto promovido por la Coordinadora Estatal de Organizaciones Pacifistas.- María Gascón y Manuel Gari.