Volkswagen pide a Seat la reducción de 4.500 puestos de trabajo antes de fin de año

El plan industrial ya ultimado entre Volkswagen y Seat prevé la reducción de alrededor de 4.500 puestos de trabajo en el transcurso de este año, como condición previa a la firma última del acuerdo de integración entre las dos sociedades, cuyas negociaciones se encuentran muy avanzadas, según confirmaron fuentes solventes. De este modo, la plantilla de Seat habría de quedar reducida a 19.000 trabajadores, de los 23.500 que en la actualidad la componen. La reducción deberá llevarse a cabo a través de bajas incentivadas, cuya indemnización correrá a cuenta exclusivamente de Seat. Posteriormente, los negociadores han previsto ya el rejuvenecimiento de la plantilla, previsto mediante la contratación inicial de 1.000 jóvenes en contratos en prácticas y formación.

En el caso de que la regulación de empleo se produzca de forma inmediata -durante los próximos dos meses-, se considera inminente la firma del acuerdo de integración entre las dos empresas. A pesar de que fuentes del Instituto Nacional de Industria (INI) sólo consideraron ayer ultimado el plan industrial para configurar la nueva Seat, otras fuentes confirmaron que los negociadores han sentado ya las bases de la futura integración, tanto en el aspecto industrial, como en el financiero y también respecto a los aspectos laborales y tecnológicos.

Dichas bases -cuya materialización definitiva no se espera antes de fin de año- incluyen el compromiso del INI de afrontar el saneamiento financiero de la empresa, que en los últimos años alcanzó números rojos por un ímporte total de 161.797 millones, a los que habría que añadir los resultados, presumiblemente también negativos, de 1985 y, además, el importe de las indemnizaciones. La entrada de Volkswagen se producirá, inicialmente, con la adquisición del 51% de las acciones, aunque la intención, tanto del Gobierno español, como de la multinacional alemana occidental, es que esta última posea la práctica totalidad de Seat antes de 1990.

Las pérdidas futuras

Otro de los aspectos abordados en la negociación se refiere a la aportación de Volkswagen, que alcanzará, al parecer, 300.000 millones de pesetas en inversiones durante los próximos años.Las inversiones se efectuarán, según las mismas fuentes, con la ayuda de créditos españoles oficiales a bajo interés. Volkswagen desea que España responda mediante avales de las hipotéticas pérdidas de Seat hasta 1990, fecha en que se espera haber superado la situación deficitaria.

La negociación ha incidido de forma notable en las inversiones que se realizarán en el centro técnico de Martorell y en la puesta en funcionamiento de un nuevo taller de motores, aunque, al parecer, los técnicos españoles no han mejorado las posturas respecto a la consolidación de modelos propios para Seat en el mercado. Tanto la pervivencia de la marca como de la red comercial y de la identidad del producto fueron condiciones de partida de las conversaciones.